فرضية علاقة الإجهاض مع سرطان الثدي (بالإنجليزية: Abortion–breast cancer hypothesis) وهي تفترض أن الإجهاض المُتعمد يُمكن أن يؤدي إلى ارتفاع إمكانية حدوث الإصابة بسرطان الثدي. تتناقض هذه الفرضية مع الرأي العلمي الحالي ومع كبار المُنظمات الطبية. تزداد مستوى الهرمونات في بدايات الحمل والذي يؤدي بدوره إلى زيادة حجم الثدي. تتحدث الفرضية عن أن في حال حُدوث انقطاع الحمل عن طريق الإجهاض، فأنه سوف ينتجُ عدد من الخلايا غير الناضجة مؤدية إلى خطر أكبر مُحتمل للأصابة بسرطان الثدي مع الوقت. ظلت هذه الفرضية محل جدل لوقت طويل، وتوصل المجمع العلمي إلى أن الإجهاض لا يسبب سرطان الثدي. وأن سرطان الثدي لا يجب أن يكون محل قلق من السيدات اللائي لم يكتمل حملهن أو اللواتي يردن الإجهاض. وقد تم دعم هذا الإتجاه من جهات طبية كثيرة، بما فيها منظمة الصحة العالمية، المعهد الوطني للسرطان، جمعية السرطان الأمريكية، الكلية الأمريكية لأطباء الأمراض النسائية والتوليد، الكلية الملكية لأطباء النساء والتوليد، المركز الألماني لبحوث السرطان،والجمعية الكندية للسرطان. ظل بعض الناشطين ضد الإجهاض في الإدعاء بأن هناك علاقة سببية بين الإجهاض وسرطان الثدي،واستجابة لاهتمام المجتمع بهذا الأمر عقد المعهد الوطني للسرطان ورشة عمل، جمع فيها ما يزيد عن 100 خبير في هذا المجال، والذين خرجوا بنتيجة توافقية مفادها أنه وإن كانت هناك أبحاث تثبت وجود علاقة إحصائية ما بين الأمرين، إلا أن الدلائل العلمية الأقوى، المبنية على دراسات التعرض المستقبلية، تنفي وجود علاقة ما بين الأمرين، وأن النتائج الإيجابية ربما كان مردها إلى إنحياز الاستجابة. بينما يرى آخرون أن الربط بين الأمرين يندرج تحت إستراتيجية عداء الإجهاض المتمركز حول المرأة. (ar)
The abortion–breast cancer hypothesis posits that having an induced abortion can increase the risk of getting breast cancer. This hypothesis is at odds with mainstream scientific opinion and is rejected by major medical professional organizations; despite this, it continues to be widely propagated as pseudoscience, typically in service of an anti-abortion agenda. In early pregnancy, hormone levels increase, leading to breast growth. The hypothesis proposes that if this process is altered by an abortion, then more immature cells could be left behind, and that these immature cells could increase the risk of breast cancer over time. The abortion–breast cancer hypothesis has been the subject of extensive scientific inquiry, and the scientific community has concluded that abortion does not cause breast cancer and that breast cancer should not be a concern for women who are having a miscarriage or considering having an abortion. This consensus is supported by major medical bodies, including the World Health Organization, the U.S. National Cancer Institute, the American Cancer Society, the American Congress of Obstetricians and Gynecologists, the Royal College of Obstetricians and Gynaecologists, the German Cancer Research Center, and the Canadian Cancer Society. Some anti-abortion activists have continued to advance a discredited causal link between abortion and breast cancer. In the United States, they have advanced state legislation that in several states requires health care providers to present abortion as a cause of breast cancer when counseling women who are seeking abortion. This political intervention culminated when the George W. Bush administration altered the National Cancer Institute website to suggest that abortion might cause breast cancer. In response to public concern over this intervention, the NCI convened a 2003 workshop bringing together over 100 experts on the issue. This workshop concluded that while some studies reported a statistical correlation between breast cancer and abortion, the strongest scientific evidence from large prospective cohort studies demonstrates that abortion is not associated with an increase in breast cancer risk, and that the positive findings were likely due to response bias. The ongoing promotion of a link between abortion and breast cancer is seen by others as part of the anti-abortion "woman-centered" strategy against abortion. Anti-abortion groups maintain they are providing information necessary for legally required informed consent, a concern shared by some politically conservative politicians. The abortion–breast cancer issue remains the subject of political controversy. (en)
La hipótesis del aborto-cáncer de mama establece que haber tenido un aborto inducido puede incrementar el riesgo de desarrollar cáncer de mama. Esta hipótesis no cuenta con respaldo científico, pues tanto el consenso científico dominante como la mayoría de las organizaciones médicas profesionales la rechazan. En etapas tempranas del embarazo los niveles hormonales incrementan, por lo tanto, hay un crecimiento de las mamas. Esta hipótesis propone que si este proceso es interrumpido por medio del aborto, entonces quedarán restos de células inmaduras en la madre y estas células pueden incrementar el riesgo de cáncer de mama a largo del tiempo. La comunidad científica ha cuestionado duramente la hipótesis del aborto-cáncer de mama y ha concluido que el aborto no causa cáncer de mama, por lo que el cáncer de mama no debería ser una preocupación para las mujeres que han sufrido un aborto espontáneo o están considerando tener un aborto. Este consenso es apoyado por organizaciones médicas mayores incluyendo a la Organización Mundial de la Salud, el Instituto Nacional del Cáncer de los Estados Unidos, la American Cancer Society, el Congreso Americano de Obstetras y Ginecólogos, el Colegio Real de Obstetras y Ginecólogos, el Centro Alemán de Investigación de Cáncer y la Asociación Canadiense del Cáncer Algunos activistas anti-aborto aún continúan relacionando el desarrollo de cáncer de mama con el aborto, a pesar de que esta teoría ha sido desacreditada. En los Estados Unidos estos esfuerzos han llegado a ser legislaciones estatales en las cuales la ley requiere que las instituciones de salud presenten al aborto como causa de cáncer de mama al momento de aconsejar a las mujeres que buscan tener un aborto. Esta intervención política culminó cuando el gobierno de George W. Bush alteró el sitio web del Instituto Nacional de Cáncer para indicar que el aborto podría causar cáncer de mama. En respuesta a las preocupaciones del público ante esta intervención, en el año 2003 el NCI juntó a más de 100 expertos en el tema para trabajar en una clínica concluyeron que a pesar de que algunos estudios reportan correlación estadística entre el cáncer de mama y el aborto, la evidencia científica más redundante obtenida a partir de estudios de cohorte prospectivos demuestran que el aborto no está relacionado con un incremento en el riesgo de desarrollar cáncer de mama y que los resultados que demostraban correlación fueron posiblemente consecuencia del sesgo de respuesta. La continua promoción de la existencia de un vínculo entre el aborto y el cáncer de mama es visto por muchos como parte de la estrategia del activismo anti-aborto, el cual pretende poner a la mujer en el centro del tema. Los grupos anti-aborto insisten en que cuentan con información necesaria para legislar el requerimiento del consentimiento informado, lo cual es un tema de interés para algunos políticos conservadores. Por esto el tema del aborto y cáncer de mama sigue siendo sujeto de controversia política. (es)
فرضية علاقة الإجهاض مع سرطان الثدي (بالإنجليزية: Abortion–breast cancer hypothesis) وهي تفترض أن الإجهاض المُتعمد يُمكن أن يؤدي إلى ارتفاع إمكانية حدوث الإصابة بسرطان الثدي. تتناقض هذه الفرضية مع الرأي العلمي الحالي ومع كبار المُنظمات الطبية. تزداد مستوى الهرمونات في بدايات الحمل والذي يؤدي بدوره إلى زيادة حجم الثدي. تتحدث الفرضية عن أن في حال حُدوث انقطاع الحمل عن طريق الإجهاض، فأنه سوف ينتجُ عدد من الخلايا غير الناضجة مؤدية إلى خطر أكبر مُحتمل للأصابة بسرطان الثدي مع الوقت. (ar)
The abortion–breast cancer hypothesis posits that having an induced abortion can increase the risk of getting breast cancer. This hypothesis is at odds with mainstream scientific opinion and is rejected by major medical professional organizations; despite this, it continues to be widely propagated as pseudoscience, typically in service of an anti-abortion agenda. (en)
La hipótesis del aborto-cáncer de mama establece que haber tenido un aborto inducido puede incrementar el riesgo de desarrollar cáncer de mama. Esta hipótesis no cuenta con respaldo científico, pues tanto el consenso científico dominante como la mayoría de las organizaciones médicas profesionales la rechazan. En etapas tempranas del embarazo los niveles hormonales incrementan, por lo tanto, hay un crecimiento de las mamas. Esta hipótesis propone que si este proceso es interrumpido por medio del aborto, entonces quedarán restos de células inmaduras en la madre y estas células pueden incrementar el riesgo de cáncer de mama a largo del tiempo. (es)