Enrique de Leguina, Recuerdos de Cantabria (original) (raw)

Enrique de Leguina y Vidal

La pesca en la costa

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Revista Europea, Madrid, 20 de junio de 1875, año II, tomo IV, nº 69, páginas 612-615.

Los cántabros que, como marinos, adquirieron honra y prez en numerosas campañas, asistiendo á la mayor parte de los gloriosos sucesos que formaron en lo antiguo la fama de la Armada Española, hubieron desde un principio de dedicarse á la pesca, sin la cual no hay Marina, ni Navegación. No vamos, sin embargo, en este lugar á referir los hechos y hazañas realizadas por los marineros cántabros, cuya osadía encomia obra excelente de distinguido escritor contemporáneo, así omitiremos referir la toma de Sevilla en 1248; la de Cádiz en 1262; la empresa de D. Pedro contra Aragón en 1351; el apresamiento de la Escuadra del Rey de Portugal; los sucesos del cabo de la Loire, y tantos otros hechos conducentes al intento de presentar al cántabro fuerte en la guerra, como en la paz industrioso. Tampoco es nuestro ánimo examinar los géneros de pesca y diversa aplicación de sus artes usadas con la tenacidad y constancia que hacen al marinero de la costa afrontar un día y otro los riesgos y penalidades de la mar, contra la cual libra tan continuados combates, y mucho menos nos proponemos esclarecer si á tan útil atractivo se debió la fundación de varias importantes villas del litoral, como sostienen algunos, que suponen fue la pesca de la ballena, cuya última expedición salió de Comillas en 1820, causa de la población de Casto-Urdiales, Guetaria, San Vicente, Rivadesella, Luanco y Luarca, ya que consta evidentemente por documentos auténticos que Bermeo, Laredo y otros puertos recibieron considerable aumento, merced á las Compañías que se fueron formando para la mencionada pesca, entonces abundante en nuestros mares.

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