Ace Attorney RPG (original) (raw)
Había algo en el caso de Eladio Donald que olía a chamusquina, o esa era la opinión del recién llegado fiscal Mies Edgeworth. Al encontrarse como simple público en el juicio, se había podido permitir abandonar la sala con la intención de investigar el historial del joven acusado en la biblioteca de los juzgados.
Tan sólo había subido un tramo de escaleras, pero había sido más que suficiente para encontrarse con varias personas que le habían obligado a perder el tiempo. Aunque había pasado varios meses fuera del país, él se reencontraba con viejos conocidos con un simple "hola" o "buenos días". No obstante, dichas personas se empeñaban en enfrascarse en conversaciones que, a su ver, no eran más que pura formalidad. Una pérdida de tiempo en esos momentos en los que tenía algo bastante más importante que hacer.
Por fin se encontraba en la planta de la biblioteca. Aligeró el paso para ponerse manos a la obra cuanto antes, pero de nuevo tuvo que obligarse a desviar su recorrido. Esta vez, de manera urgente.
Cuando pasaba por delante del servicio de señoritas, advirtió que la puerta no cerraba del todo a causa de que algo lo impedía desde el suelo: una mano. Edgeworth se apresuró para atender a la que suponía sería una mujer que habría sufrido un simple desmayo, pero lo que halló al abrir la puerta del servicio hizo que permaneciera ojiplático en la entrada durante lo que le parecieron largos segundos.
Tendida en el suelo, sobre un reguero de sangre, yacía una joven que le era bastante familiar. Vestía con una camiseta del tejón azul, por lo que le hizo pensar que tenía alguna relación con la policía. Se arrodilló a su lado e inmediatamente se acercó a su rostro para comprobar que seguía viva. Su respiración era irregular, pero, para su alivio, tenía respiración. Luego se escuchó a sí mismo llamándola "Maggey". Su cerebro, que en ese momento iba a mil por hora, le recordó que la había visto en alguna ocasión hablando con el inspector Gumshoe.
Mientras buscaba su teléfono móvil con una mano que no sabía en qué momento se había manchado de sangre, advirtió una herida en el cuello de la joven. Herida que, se atrevió a pensar, había sido causada por mordedura, tal y como indicaban las marcas.
Maldijo en voz alta varias veces al darse cuenta de que no llevaba el móvil encima, y no sabía dónde ni cómo lo había perdido. Se puso en pie a toda prisa para pedir ayuda, pero cuando llegó a la puerta se detuvo; no podía abandonar a la chica.
Para su alivio, escuchó pasos al fondo del pasillo.
-¡Ayuda! -exclamó, esperando que la persona que se aproximaba no fuera el agresor.
[OOC: Me da un poco de respeto postear algo "importante", y más con Edgeworth ^^·U , pero bueno. Adrian, aquí te espero~]