Lorenzo Aguirre – DICCIONARIO DE PINTORES ALICANTINOS (original) (raw)
NACIMIENTO: Pamplona, 14 de noviembre de 1884- Madrid, 6 de octubre de 1942 (En 1942 fue ejecutado en la madrileña cárcel de Porlier bajo la acusación de auxilio a la rebelión).
**ESTILO PICTÓRICO:**Bernardino de Pancorbo decia que » _Lorenzo Aguirre Sánchez puede poner debajo de su nombre a titulo de profesión, nada más que siete palabras : pintor, cartelista, caricaturista, periodista, escenógrafo, comediógrafo y policía_«. Es el prototipo de artista modernista, polifacético y gran conocedor de la cultura.
«Su pintura ofrecería siempre la mística gravedad navarra y la euforia luminosa del Mediterráneo. Su mirada distribuye en los lienzos la penumbra ancestral de la meditación y la eternidad súbita de la luz» .
Rubén Darío escribió sobre Antonio Machado: «_Era luminoso y profundo, como era hombre de buena fe_«; Aguirre fue un artista y un hombre machadiano. De su buena fe hay muchas pruebas. Una de ellas: su predilección por el retrato, su respeto por los rostros humanos.
Un respeto que se desplaza también a los paisajes: en su obra los paisajes no son acotaciones del territorio del planeta, sino palpitaciones de la misteriosa casa colectiva en donde los seres humanos «viven, laboran, pasan y sueñan, y en un día como tantos, descansan bajo la tierra».
«A los retratos de Aguirre los ilumina la fraternidad; a sus paisajes los iluminan la lentitud y la compasión. Y siempre, en los rostros de sus criaturas y en los rostros de sus paisajes, comparece la alegría de los colores besándose los unos a los otros; la alegría que exhalan la presencia y las grietas de la vida. Porque pintar de verdad, con verdad, es un acto de gracias.» según Félix Grande en el país 1999.
Lorenzo Aguirre fue depurando sus dibujos, convirtiéndose en un gran sintetista del trazo. Elaboraba unos tipos que servían de arquetipos generales, es decir, personajes que pueden quedar en la memoria popular, como el policía, el barquillero, el cacique, el juez,e el torero, el picador, el ladrón, la oronda mujer, el borracho, convirtiendo a todos estos personajes en protagonistas de sus escenas y significándose como el humorista de rasgos morales. Convirtió su obra en reportajes de su época.
No debemos de encasillar a Lorenzo Aguirre porque también participará del espíritu «fantasista».
En los años 30 coincidió en la búsqueda de la técnica de la encáustica, técnica en la que ambos, junto con Anselmo Miguel Nieto, fueron grandes innovadores.
Lorenzo Aguirre después de unos años de paciente investigación, realizó una serie de cuadros, tanto con soporte de madera, más habitual, como sobre lienzo, en los que demostró una gran maestría.
¿En que consistía esta técnica de la Encaústica?
_«Sus tarritos de cera estaban dispuestos en un cofre, maculado, ya por el uso. En ellas sumergía con medida el fino cauterio calentado en el hornillo; retiraba con aquel una gotita de cera coloreada, la depositaba en el lugar correspondiente de la obra y la mezclaba con las demás, tan seguro en el toque que me hacia sonreir de entusiasmo. Conforme iba pintando me enseñaba de qué modo iba mezclando los colores con la cera_«, según contaban Gregorio Díaz Ereño y Camino Paredes Giraldo en el Catalogo del la Exposición Lorenzo Aguirre editado por la Diputación de Alicante 2003.
Esta técnica fue descrita por Francisco Martínez, presbítero y Dignidad de la Catedral de Pamplona en el 1788, en este catalogo también la describe.
INFLUENCIAS: Es discípulo de Lorenzo Casanova. Es discípulo de los maestros Bailly y Gambón durante su permanencia en París
**BIOGRAFÍA:**Nace en Pamplona, pero se traslada muy joven a vivir a Alicante.
A los once años de edad iniciaba en Alicante sus estudios de pintura de manos de Lorenzo Casanova.
Tres años después, en 1899, se traslada a Madrid para ampliar sus conocimientos, asistiendo a las clases de la Escuela Superior de Pintura, Escultura y Grabado.
Aguirre obtuvo el título de profesor de dibujo en la Escuela Especial de Pintura, Escultura y Grabado de Madrid en el año 1904
El maestro casanova había fallecido el 23 de marzo de 1900 y Lorenzo Aguirre no estuvo en su sepelio al haberse trasladado ya a Madrid.
En su constante deseo de no ignorar los secretos del arte, en 1901 viaja a la vecina capital francesa gracias al dinero obtenido al subastar una imagen de la virgen pintada por él mismo. Es en esta bella ciudad perfecciona sus conocimientos, especialmente a cuanto se refiere a la escenografía, asistiendo a los talleres que poseía la Gran Opera.
Recorrió varias ciudades europeas para saciar su sed en los museos y regresó a Madrid con 23 años de edad y los ojos y el entusiasmo transformados en almacenes de pintura.
En Madrid, pinta, dibuja, hace caricaturas.
En 1905, al carecer de beca tuvo que volver a Alicante, sabiendo por sus amistades del ambiente tan extraordinario que se vivía en París, España se le quedaba pequeño. falto de dinero, pintó una inmaculada Concepción y organizó una rifa, con cuyo dinero pudo trasladarse a París, donde entrará a formar parte del equipo de los decoradores de la Gran Opera, junto a dos maestros Ganhon y Baille, aprendiendo todo lo correspondiente al entramado de la escenografía, adquiriendo primero el difícil arte de concebir buenos bocetos, mostrando la perspectiva y los conocimientos constructivos que deben de ser después bases aparentemente corpóreas, cuyas enseñanzas las aplicaría Lorenzo Aguirre para actividades ajenas al teatro.
Lorenzo Aguirre no fue un pintor vanguardista, pero lo debemos distinguir de aquellos que quisieron serlo y no pudieron serlo, ya que Aguirre optó por una forma de pintar plenamente consecuente con su manera de entenderla.
Su partida de París a principios de 1907, no le permitió contemplar el nacimiento de nuevos estilos, como el cubista, pero lo suplió con el conocimiento a través de revistas y libros.
En 1908 decidió presentarse a las oposiciones que se convocaban para Agentes del Cuerpo de Vigilancia de Madrid y fue nombrado aspirante al cuerpo con un sueldo de 1.500 pesetas.
El 11 de Marzo de 1908 era destinado a Alcoy, en calidad de Agente, poco después traslado a Barcelona y para Enero de 1910 será trasladado a Alicante, donde en seguida se haría famoso no por pintor, sino por la resolución de un complicado crimen. A finales de año y gracias al celo desempeñado en su trabajo. Aguirre asciende al cargo de Segundo Jefe de Vigilancia.
En 1910 se casaria con Remedios Corbi y Sanchís.
Desde 1914 hasta 1927 estuvo destinado en Madrid, tras una breve estancia en Murcia, ascendió al grado de Inspector de tercera y poco después al de segunda clase, al figurar el número uno en el escalafón de su clase.
En 1927, su mujer gravemente enferma fallece en su domicilio madrileño. Este hecho y que su madre viviese en Alicante, le animó a pedir el traslado a Alicante.
El taller del pintor estará situado en la parte más pintoresca de Benalua. Desde su estudio viajará a toda la provincia tratando con sus pinceles los paisajes de su entorno, inventando carteles y diseñando ninots para las Hogueras.
Cuando retorna a Alicante, se inician, alentadas por el gaditano José María Py y por la asociación Alicante-Atracción, las Fiestas de las Hogueras de San Juan.
Lorenzo Aguirre, además de hacer el cartel que anuncia dichas fiestas, construye, precisamente para la Comisión de la Plaza de Isabel II ( Hoy Plaza de Gabriel Miró), obtiene el 2º premio por la Hoguera «Los Presidente de torrejón».
En 1929 colabora con José Marced Furió en «La barraca de Fira» y en el 1930, alcanza el 4º premio por la Hoguera titulada !Tot lo coir a la mar!»
Los carteles oficiales de las primeras hogueras, durante los años 1928, 1929 y 1930. Carteles suyos anunciaron también el Carnaval o las verbenas benéficas organizadas por la Junta Municipal de Beneficencia a beneficio de la «Gota de leche» (1929 y 1932) y las fiestas de invierno de 1932 y en 1922 las fiestas de verano.
Vinculados, en parte al Art decó, asimilo parcialmente ciertas corrientes contemporáneas, contribuyendo a proporcionar un ambiguo atractivo. Podemos intuir en sus obras planteamientos cubistas, futuristas, todo ello junto a elementos propiamente ornamentales que inciden en el lenguaje moderno, que se apoya ante todo en el predominio de las lineas geométricas, con diagonales y formas apiramidadas.
Su sueldo de policía le permite vivir cómodamente
En Alicante aprende rápidamente el valenciano y comienza a colaborar en periódicos y revistas como El Tio Cuc y a realizar sainetes fogueriles.
Su contacto con el teatro no fue solamente en calidad de escenógrafo, sino que también se atrevió a poner la letra a tres piezas líricas de su sobrino, el compositor alicantino José Terol Corbí:
El sainete Alfonso, el enterao (1918),
la zarzuela ,La última canción (1919)
y la opereta La Estrella de Oriente(1920).
También escribió la revista Fogueres de Sant Joan, una obra inédita de temática foguerera, donde, a manera de mosaico, desfilan varios personajes de la mitología griega junto a otros típicamente alicantinos.
En los años veinte Lorenzo Aguirre ya había logrado un gran renombre por sus pinturas, que podemos inscribir dentro del denominado “Art Nouveau” hasta el punto que obtuvo varios premios nacionales e internacionales.
Si sorprendió a los alicantinos (que lo verán como pintor), su faceta libretista, a los madrileños, que lo conocían como dibujante, igualmente les desconcertó la realización en Madrid de su primera exposición.
«En enero de 1930 se casó en segundas nupcias con Francisca Benito Rivas, con quien tuvo tres hijas.
La paternidad y la República le ayudaron a vivir los años más dichosos y más fértiles de su vida.
Sus hijas lo recuerdan llevándolas a ellas y a su esposa a los cines de sesión doble casi todos los días, entusiasmándose con las historias prodigiosas que discurrían en las pantallas cinematográficas, jugando encarnizadamente al ajedrez con la abuela Genara, pintando horas y horas con una concentración tan fulminante que le llevaba a mojar los pinceles en su tacita de café mientras sonreía contemplando una pincelada.
En uno de aquellos instantes de ensimismamiento en que Aguirre bebía café embadurnado de materias pictóricas y reflexionaba sobre la luz de un rostro, estalló la guerra civil.» según Felix Grande (El pais 1999)
En los años 30 se matriculó en los cursos de Grabado Artístico y Fotografía Aplicada en la Escuela de Artes y Oficios y compaginando su faceta como artista y siendo republicano convencido y miembro del Partido Comunista, se hizo cargo de la dirección de la Escuela de la Policía Española.
Su carrera profesional en Madrid fue todo un éxito, llegando ha hacerse cargo interinamente de la Escuela de Policía. Su prestigio como docente le valió el que, junto a Tomás Flores Vicente y Agustín María Ripoll, fuese nombrado para constituir una ponencia que formulase, en el menor tiempo posible, el nuevo plan de enseñanza teórico- practico de la Escuela de Policía
El 18 de julio de 1936 comienza la Sublevación de parte del ejercito contra el Gobierno legítimamente constituido, provocando el estallido de una fratricida guerra que acabó con las esperanzas de modernidad de una gran parte de la población.
Lorenzo Aguirre, Republicano convencido, miembro del Partido Comunista, defendió la legalidad y poco después, el 8 de septiembre, fue nombrado Jefe Superior de Policía de Madrid. Precipitadamente y trasladado el gobierno a Barcelona, tuvo que seguirlo abandonando su hogar en Madrid, donde tuvo que dejar gran parte de sus cuadros y biblioteca. Desde el 11 de Diciembre de 1936 se traslado a Valencia, donde seguiría desempeñando el mismo cargo.
En Valencia solicitó entrar en la Logia masónica cuyo nombre era «La accidental, en los informes de dos de sus miembros decían que «era un hombre de ideas democráticas, de amplia cultura, bueno de carácter y temperamento tranquilo y calculador, honradez profesional buena y buen comportamiento con su familia al igual que su solvencia moral es buena», según El archivo de guerra de Salamanca. Tribunal especial para la represión de la masoneria y el comunismo. Expediente de Lorenzo Aguirre nº 4 A, legajo nº 136.
En los informes se aconsejaba su aceptación, pero parece ser que no llego a formalizar por la dinámica de la guerra. Una vez más se traslado con su familia a Barcelona y después a Francia, iniciando el exilio.
En 1939 cayó por el barranco del exilio con su mujer, sus hijas y la abuela Genara.
Vivió unas semanas en París intentando, como Modigliani, vender dibujos y acuarelas por las calles y las placitas.
Su hija Francisca Aguirre escribiría mucho más tarde: «Y como a Modigliani, tampoco a él le compraban».
Se trasladó con su familia a Le Havre, con el propósito de embarcar hacia Latinoamérica, y pintaba retratos y paisajes marítimos, como aferrándose a la solidaridad de los rostros humanos y a la esperanza de una salvación oceánica, que nunca se produjo.
Vivían en un hotelito llamado La Rotonde de la Gare, junto al puerto y junto a la estación del ferrocarril, dos objetivos codiciados por los bombarderos alemanes, de manera que a veces se desplazaban a gatas por la habitación para que no les alcanzase la metralla que irrumpía por la ventana con su silbido criminal.
En Junio de 1939 hizo una exposición en la Galeria George V de Le Havre, expuso 25 cuadros de retratos y paisajes. El paisaje será el de Normandia que captará con delicadeza.
Y una segunda exposición organizado por la Señora de la Montagne, pero el estallido de la 2ª guerra Mundial y el acercamiento de los Nazis a París hizo que Lorenzo Aguirre y su familia decidieran volver a España.
Su familia regresó por Hendaya en el mes de Febrero, Lorenzo Aguirre esperaría unos meses más en la ciudad fronteriza, pero en Mayo ante la ocupación de Francia por las tropas alemanas, penetro en la península, siendo inmediatamente detenido e ingresado en la prisión de Ondarreta en San Sebastian.
En unas condiciones pésimas, el arte afloró encontrando ánimos para pintar. Para las monjas que atendían a los presos pinto cuatro cuadros en los que relata la vida de su fundadora, la madre rafols. Son cuadros de elaborado dibujo y dentro de la tradición barroca española religiosa, en ellos retrato a sus hijas como las niñas que en algún momento acompañan a la fundadora.
Fue acusado de «rojo asesino», «falso artista» y de «auxilio a la rebelión» (!!). Al ser subdirector de Policía de Madrid en 1936, en la Causa General se le involucró en el asesinato de José Calvo Sotelo.
El 8 de febrero de 1941 lo trasladaron a la cárcel madrileña de Porlier. Aquí realizó unos de sus mejores cuadros «Cabeza de Vasco», en el que efigia, en un perfil rotundo, escultórico, la cabeza de un compañero de prisión (medico-cirujano), insertándola en un paisaje posterior como si quisiera exortizar las cuatro paredes que le tenían aprisionado.
Poco antes de morir escribió tres cuentos, cada uno de ellos dedicados a una de sus hijas en ellos inventa y recrea cuentos tradicionales, adaptando cada uno a las características de cada una de sus hijas, la presumida, la soñadora, la valiente….. son cuentos que emocionan por la frescura del dibujo, la concrección de la linea, el exquisito arabesco y la diestra y la armoniosa mano que siempre alentó su vocación artística.
Pese a que sus tres hijas pidieron de rodillas clemencia a Carmencita, hija de Franco, en el día de su santo, Aguirre fue ejecutado a garrote vil ante todos los presos de la cárcel el 6 de octubre de 1942.
En 1947 fue investigado por el Tribunal Especial para la Represión de la Masonería y el Comunismo. Al no conseguir establecer su «condición de masón» archivaron el expediente de un hombre que llevaba cinco años muerto.
En 1947 se archiva su expediente de masón por no haber encontrado pruebas en su contra.
Aguirre fue clandestino durante medio siglo, pero su pintura está viva. Respiraba en sigilo durante la inacabable posguerra, pero permanecía viva y crecía hacia la vida. Durante décadas no pudo vivir en las salas de exposiciones, pero permanecía viva y se agrandaba hacia el interior de la vida.
En el año 1986, y gracias a la gestión de Concepción Badiola y Pedro Manterola, el Banco de Bilbao expuso las obras de Aguirre en Pamplona y Bilbao, donde es admirado.
En Alicante, gracias al diputado provincial D. Miguel Valor, se le dedicó en 2003 un homenaje en el MUBAG en forma de exposición.
Tanto el Bloc como Alí Cremades solicitaron a Alperi una calle para Aguirre.
EXPOSICIONES MÁS SIGNIFICATIVAS:
En el año 1904 participó, junto con Daniel Vázquez Díaz y José Gutiérrez Solana, en la Exposición Nacional de Bellas Artes, con el cuadro que tendrá por titulo «El onceno no estorbar», que preludiará el toque humorístico de algunos de sus cuadros posteriores y su afición por el mundo de la caricatura.
1903 cuadro «Cabeza» o «la abuela victoriana«, retratos que escenifican una de sus preferencias el retrato.
1904 tenemos el cuadro «vista del interior de Fornos», cafe popular madrileño
En 1905 pintó y rifó una «Inmaculada Concepción» y con el dinero obtenido en la rifa viajó a Francia, en donde formó parte del equipo de escenógrafos de la Ópera de París.
En 1910 participó en México en una exposición celebrada con motivo de la conmemoración de su independencia y obtuvo la medalla de bronce, su primer premio importante.
En 1912 volvía a concurrir a la Exposición Nacional de Bellas Artes y esta vez lo hizo con 2 cuadros.
El 9 de Mayo de 1914, un dibujo de Aguirre ilustraba un articulo escrito por Pedro de Répide y que llevando por titulo «El viejo barranco» apareció en la revista «La esfera»
En esos años sigue participando en exposiciones en Madrid y la revista La esfera comienza a publicar sus ilustraciones. Poco a poco sus caricaturas empiezan a ser incluidas en varios medios. Paralelamente se fue convirtiendo en uno de los nombres referentes en los salones de Humoristas y en las escenografías de los teatros.
En 1914 empezaba una aventura expositiva en la que Aguirre participó en numerosas ocasiones, nos referimos al Salón del Humorista.
La caricatura estaba en decadencia pero surgió el renacimiento por la inclusión de las caricaturas que hacían referencia a la primera guerra mundial, actuando cada periódico según sus simpatías personales o «según las imposiciones de los respectivos directores».
Por la decisión de declararse neutrales: Tovar Galvañ, Sileno, Roberto Marín, León, Marco y Lorenzo Aguirre, realizaron caricaturas donde dejaban claro su apoyo a los aliados.
En 1916 colaboró con el semanario satírico madrileño «El indiscreto»
1917 expuso sus dibujos en el Salón de los Humoristas, junto a Sancha, Bartolozzi, Penagos…, experiencia que repitió dos años después junto con Vázquez Díaz y Benjamín Palencia.
Su presencia en Madrid le permitió frecuentar los salones de humoristas, los cuales debido a las criticas de los dibujantes españoles no eran humoristas, y de que en los salones abundaban más los dibujos «serios», que los cómicos, se crearon apartados de «Caricaturas» y «Dibujos decorativos».
En 1918 el Salón del Humorista tenia el subtitulo de 2 Artistas decoradores», esto le fue definiendo como caricaturista (es decir dibujante satírico o regocijante) y así quedó definido en el posterior salon de 1919. El presentó la obra caricaturista » ¿Que tienes en la mirada?
1919 el Ateneo de Madrid organiza su primera exposición individual de pinturas.
Realizó diversas exposiciones destacando las que hizo en Madrid en 1919, 1920 y concurrió a certámenes y concursos artísticos.
Participó en el concurso de portadas de la Revista Nuevo Mundo, adquirieron la suya y hará la portada de la revista Esfera nº 287
Realizó varios libretos para su sobrino el compositor José Terol Corbi.
En 1918, El sainete lírico » Alfonso el Enterao» estructurado en un acto y tres cuadros, ambientado en las costumbres madrileñas y otro de carácter melodramático que llevaba por titulo «La última canción» y en 1920 «La estrella de Oriente», otro de sus libretos tenia por titulo «Fogueres de San Chuan»
1920 consiguió el premio del Concurso de carteles de Fomento de las Artes.
A finales de 1920 y principios de 1921, Exposición individual en los salones de Arte moderno de Madrid, recopilaba obra paisajista de la que Silvio Lago dice » Refleja la imagen de artista levantino porque da la visión de Alicante con su luz cruda, su mediterráneo densamente aniñado, sus tierras rojas y sus palmeras que parecen suspirar de sed como las africanas». Pero no seguía la tradición luminista de otros artistas, al amparo de Sorolla.
En Julio de 1921 la política militar de los gobiernos sufrió un serio descalabro en Igueriben y Annual, costando más de 14.000 bajas del ejercito y produciendo el desplome de toda la zona oriental del protectorado, dos años después el sistema constitucional instalado por Canovas en 1876 caía por tierra por «La dictadura de Primo de Rivera»
1922, tras 7 años de ausencia, concurrió a la exposición Nacional con la obra «Luz divina» y obtuvo la Medalla de Tercera Clase en el mismo año en el que otro navarro, Fructuoso Orduna ganó la de primera. La distinción le valió para ser objeto de un reconocimiento por parte de la Comunidad Navarra en Madrid.
1923 y 1925 Participó en el salón de Otoño
En 1924 participó en la exposición Nacional con las obras «Rosas de Te» y «Mascarillas Destrozonas«, no obtuvo premio pero tuvo su mérito «Rosas de té ilustró la portada de la Revista Esfera».
En septiembre 1924, gano el primer premio de carteles en el VII Concurso de Oleicultura y Exposición Olivicola Nacional
1926 su obra «**Crepúsculo de vidas»** obtuvo la Medalla de Segunda Clase en la Exposición Nacional de Bellas Artes.
1925 primer y segundo premio en el concurso de carteles anunciadores del Cergumil.
En 1925 obtuvo una medalla de oro en la Exposición Internacional de Artes Decorativas, en París, y en el año siguiente obtuvo otra medalla en Madrid, en la Exposición Nacional de Bellas Artes.
A finales de 1925 participo en la exposición de Mejico organizada por la asociación de pintores y escultores. Lorenzo Aguirre participó con la obra «Oterito», retrato de la cantante española, cuya belleza contrastaba con sus dotes para el canto.
En 1926 obtiene la medalla de segunda clase en la Exposición Nacional del mismo año con su cuadro «Crepúsculo de vidas»: Es una obra de grandes dimensiones, un grupo de personajes a contratiempo se reúne al amanecer en torno a un simón, un sereno, una vendedora de periódicos, un pillo y varios conductores de coches de caballos se reúnen para descansar de la fatiga y de la inclemencia del tiempo de una noche fría y lluviosa. Los individuos miran al espectador
En el 1928 realizará en su estudio en Benalua «La Playa»
En el 1930 «El Portet», ambos caracterizados por la linea horizontal muy elevada y por la uniformidad de una atmósfera que unifica la composición y destaca la claridad del dibujo, convirtiendo el motivo en pura poesía.
En 1933 y 1934 se matriculó en la Escuela de Artes y Oficios Artísticos, en los cursos de Grabado Artístico y de Fotografía aplicada, incluso volcado en la actividad docente, opto a una plaza de profesor auxiliar temporal de dibujo lineal en la misma escuela.
1934 medalla en la exposición de la Asociación de pintores y escultores.
Obtuvo medalla de oro en la exposición de Artes decorativas de París.
En las Exposiciones nacionales de 1928, 1930 y 1932 se presentó con una obra, uno de ellos se llama «»Paisaje Metropolitano», nos muestra un campo de futbol de los arrabales de Madrid.
OBRAS MÁS DESTACADAS: El onceno, no estorbar; Retrato de mujer; Lluvia de oro;
«Luz divina», Es una obra de gran tamaño y de gran juego simbólico. La obra refleja el momento en que una monja procede a leer a un grupo de mujeres ciegas acogidas en el Asilo del Pacifico de Madrid. En un ambiente de calma y sencillez, la luz inunda la habitación, luz que sirve solo para que el espectador pueda ver la escena
Rosas de Té; Margaritas destrozadas; Crepúsculo de Vidas; Retrato de D. Valentín Aguirre; San Fermín y Paisaje de Madrid.
En los años 1920 «Picador», una de sus mejores obras al óleo.
«El cuadro de las Puyas»,(1920) donde realiza una versión de «Las lanzas» de Velázquez
La fuerza de sus cuadros «El puerto de Alicante», «La casa del rector de Guadalest», «La ermita del calvario en Aspe» o «la entrada de la virgen», se imponían como la narración de una crónica.
La obra «Calle del Sol», se reconoció su carácter escenográfico. Lorenzo Aguirre en sus cuadro paisajistas busca puntos de vista elevados, marcando un picado que tiene connotaciones cinematográficas, jugando con la experimentalidad del cine expresionista.
La influencia de Zuloaga quedará de manifiesto en cuadros como «Los Botijeros».
«Cena de los ciegos» de temática social, obtuvo su primera medalla en el Palacio del Retiro , en su Salón de Otoño en la asociación de Pintores y escultores
El cuadro «Mascarillas destrozonas» evoca el ambiente del carnaval popular, guirnaldas y confetis a unos jóvenes en distintas actitudes que se divierten en una fiesta. Las caretas de cartón son las realizadas por los falleros en Valencia que durante los meses de carnaval cambiaban a los ninot por las mascaras. El antifaz fue la mascara aristocrática y la careta lo popular.
En 1933, los grandes formatos llenaran su estudio, como «Peixcater de Moraira», se recoge el portet de Moraira en un día claro mediterráneo.
En 1934 en la Exposición de Bellas Artes, le entregaron la Medalla de la asociación de Pintores y escultores. Presento el cuadro «Artistas de Circo»
En 1934 en Noviembre presentaría «El Remat del Casament», la que dos familias de Biar rematan las negociaciones del casamiento, en presencia de algunos testigos y un notario. Un perfecto estudio etnográfico que incluso ha servido para estudios posteriores sobre el hábito de la zona.
En 1936 su cuadro «San Fermín» lo realizó con la técnica de la encaústica. Donde junto a la calidad técnica supo aglutinar los tres planos diferentes que sirven para integrar la eficacia en el genero religioso: La ejecución plástica, la sugerencia del tema y la distribución simbólica de las figuras empleadas en el cuadro.
Biografía obtenida del catalogo publicado por la Excma. Diputación Provincial de Alicante en el 2003 escritos por GREGORIO DÍAZ EREÑO Y CAMINO PAREDES GIRALDO
http://www.alicantevivo.org/2009/06/lorenzo-aguirre-una-vida-apasionante-y.html
http://www.enciclopedianavarra.biz/navarra/aguirre-sanchez-lorenzo/386/1/
http://www.arte.sbhac.net/Plasticos/Aguirre/Aguirre.htm
Nos da mucha alegría que la familia de Lorenzo Aguirre halla donado al Museo de Bellas Artes de Alicante (MUBAG), su obra, conociendo el Museo creo que se le dará la debida preservación, difusión y Divulgación y solo recordar que tanto Lorenzo Aguirre como su hija la poeta Paca Aguirre siempre han sido muy queridos por los alicantinos .