Ampollas (para Niños) (original) (raw)
¿Te ha salido alguna vez una ampolla después de estrenar un par de zapatos nuevos? Las ampollas pueden ser incómodas, pero también son bastante frecuentes y fáciles de prevenir. Se producen por fricción, es decir, cuando dos superficies se frotan entre sí. ¡Y una de esas superficies es tu delicada piel!
¿Qué es una ampolla?
Una ampolla es un área de la piel que sobresale con un líquido acuoso en su interior. Las ampollas se forman en las manos y en los pies por la fricción y la presión, y se pueden formar bastante deprisa. Te pueden salir ampollas en los pies el mismo día en que estrenes unos zapatos incómodos o que no sean de tu talla. O te pueden salir ampollas en las manos si te olvidas de ponerte guantes protectores cuando uses un martillo, una pala o, incluso, cuando conduzcas una bici.
¿Cómo puedo prevenir las ampollas?
La mejor forma de abordar la cuestión de las ampollas consiste en impedir que aparezcan en primer lugar. Y, ¿cómo las podemos prevenir?
Para evitar que se te formen ampollas en las manos, lleva el tipo adecuado de guantes o de equipo de protección. Por ejemplo, cuando hagas tareas de jardinería, usa guantes de jardinería y, si haces gimnasia artística, usa unos protectores especiales para las palmas de las manos.
Para evitar que se te formen ampollas en los pies, elige atentamente tu calzado. Intenta comprar calzado por la tarde, ya que es el momento del día en el que los pies están más grandes. ¿Por qué? ¡Porque están un poco hinchados por haber andado con ellos durante todo el día! Y asegúrate de probarte ambos zapatos y de caminar un poco antes de comprártelos. Aunque haya unos zapatos que te parezcan preciosos, no te los compres si no te sientes cómodo con ellos. A menudo, una talla diferente o un calzado más ancho pueden marcar la diferencia.
Y aunque te encante un par determinado de zapatos, no los lleves puestos todo el tiempo. Intercálalos con otros zapatos, y lleva un calzado variado. Así, tus pies podrán hacer descansos y no siempre se rozarán en los mismos lugares.
¿Cómo puedo cuidar de una ampolla?
Si cualquier problema en la piel se te pone rojo, se te inflama o parece estar infectado, tu mamá o tu papá querrán que te vea el médico. Pero la mayoría de las ampollas se pueden tratar en casa.
Generalmente, las ampollas solo necesitan tiempo para curarse por sí solas. Mantén la ampolla limpia y seca, y cúbrela con una venda hasta que desaparezca. Mientras se cura, trata de evitar ejercer presión sobre el área de la ampolla o de rozarla con otras superficies.