Eduardo Obradó Mancholas | Universidad de Cantabria (original) (raw)

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Papers by Eduardo Obradó Mancholas

Tesis doctoral en período de exposición públicaGeografía e Histori

Encuentro De Lenguas Y Literaturas 2004 Isbn 84 944048 1 4 Pags 231 240, 2004

El Genero Negro El Fin De La Frontera 2012 Isbn 978 84 8408 648 2 Pags 219 226, 2012

Unplugged La Palabra Como Nueva Tecnologia 2013 Isbn 978 84 460 3830 6 Pags 227 234, 2013

Drafts by Eduardo Obradó Mancholas

George Pelecanos ha escrito cerca de veinte novelas ambientadas en Washington D.C. Aunque sus obr... more George Pelecanos ha escrito cerca de veinte novelas ambientadas en Washington D.C. Aunque sus obras han sido calificadas de novela criminal, la narrativa de Pelecanos trasciende el ámbito del género para abordar los problemas sociales de la ciudad desconocida, el D.C. de clase trabajadora que queda a la sombra de la capital gubernamental o de la visitada por turistas. El mérito del autor es dotar de unas señas de identidad a una ciudad que a lo largo del tiempo ha sido denostada como una ciudad sin personalidad propia y habitada por transeúntes y visitantes de paso. En la sección dedicada a la ciudad americana hemos esbozado alguna de las razones que evidencian las peculiaridades de la capital americana. Para Ezra Pound, Washington D.C. no podía equipararse a sus homólogas europeas, pues no era un foco artístico e intelectual, a diferencia de Viena, Londres o París. Hurtsfield, por su parte, subrayaba el carácter rural de la ciudad, alejada del cosmopolitismo que otras urbes americanas ofrecían (Hurtsfield 1988: 106). Las razones de estas particularidades hay que encontrarlas en la propia concepción de la ciudad, diseñada desde el inicio como capital del país. El punto de partida, por tanto, se aleja de la ciudad prototípica americana por cuanto el Distrito de Columbia no nace como final de algo, sino como el resultado del proceso de independencia del país. Para entender las peculiaridades del D.C. es necesario hacer un breve recuento de cómo se decidió construir la ciudad, dónde y qué características tiene. Una vez consumada la independencia del país, con la firma del Tratado de París en 1783, los trece estados rebeldes vieron la necesidad de establecer una capital federal que sirviera de sede para las instituciones gubernamentales de los Estados Unidos. Tras varios años de discusión, en los que el Congreso se reunía en distintas ciudades, entre ellas Filadelfia o Nueva York, y no escasas tensiones entre los estados del sur y los del norte, en 1790 se aprueba la Residence Act que permite la erección de la capital federal en unos terrenos a ambos lados del rio Potomac donados por los estados de Maryland y Virginia, y que incluían los puertos de Georgetown (actualmente un barrio del DC) y de Alexandria, respectivamente; si

in his paper Denise Mina, Ian Rankin, Paul Johnston, and The Architecture Crime

Habitualmente asociada a las grandes urbes americanas – Los Ángeles, Chicago, San Francisco, Nuev... more Habitualmente asociada a las grandes urbes americanas – Los Ángeles, Chicago, San Francisco, Nueva York-, la ficción criminal actual ha ampliado sus escenarios a lugares hasta ahora poco habituales, por no decir inéditos, en el género. No sólo podemos hablar de su aparición en países en los que no existía una tradición de este tipo de ficción, si no también de su extensión a otras ciudades de tamaño medio, en Estados Unidos y las Islas Británicas, que hasta el momento tenían escasa relevancia. Pretendemos analizar la importancia de la localización en la ficción criminal, así como las causas que la han convertido en un fenómeno global, razones que explican la proliferación de escenarios alternativos en esta literatura. Hasta épocas muy recientes, la localización desempeñaba un papel secundario dentro de la ficción criminal. Se consideraba que la caracterización o el desarrollo de la trama eran los aspectos más relevantes en este tipo de literatura. Sin embargo, en los últimos años, se ha ido imponiendo la idea de que la localización es un elemento tan decisivo como los dos mencionados anteriormente. La proliferación de escenarios poco habituales en el género refuerza esta idea. Y no podemos descartar el hecho de que, para muchos lectores, los escenarios de la ficción criminal actúan como elemento de atracción en igual medida que una trama bien construida o unos personajes interesantes.

Tesis doctoral en período de exposición públicaGeografía e Histori

Encuentro De Lenguas Y Literaturas 2004 Isbn 84 944048 1 4 Pags 231 240, 2004

El Genero Negro El Fin De La Frontera 2012 Isbn 978 84 8408 648 2 Pags 219 226, 2012

Unplugged La Palabra Como Nueva Tecnologia 2013 Isbn 978 84 460 3830 6 Pags 227 234, 2013

George Pelecanos ha escrito cerca de veinte novelas ambientadas en Washington D.C. Aunque sus obr... more George Pelecanos ha escrito cerca de veinte novelas ambientadas en Washington D.C. Aunque sus obras han sido calificadas de novela criminal, la narrativa de Pelecanos trasciende el ámbito del género para abordar los problemas sociales de la ciudad desconocida, el D.C. de clase trabajadora que queda a la sombra de la capital gubernamental o de la visitada por turistas. El mérito del autor es dotar de unas señas de identidad a una ciudad que a lo largo del tiempo ha sido denostada como una ciudad sin personalidad propia y habitada por transeúntes y visitantes de paso. En la sección dedicada a la ciudad americana hemos esbozado alguna de las razones que evidencian las peculiaridades de la capital americana. Para Ezra Pound, Washington D.C. no podía equipararse a sus homólogas europeas, pues no era un foco artístico e intelectual, a diferencia de Viena, Londres o París. Hurtsfield, por su parte, subrayaba el carácter rural de la ciudad, alejada del cosmopolitismo que otras urbes americanas ofrecían (Hurtsfield 1988: 106). Las razones de estas particularidades hay que encontrarlas en la propia concepción de la ciudad, diseñada desde el inicio como capital del país. El punto de partida, por tanto, se aleja de la ciudad prototípica americana por cuanto el Distrito de Columbia no nace como final de algo, sino como el resultado del proceso de independencia del país. Para entender las peculiaridades del D.C. es necesario hacer un breve recuento de cómo se decidió construir la ciudad, dónde y qué características tiene. Una vez consumada la independencia del país, con la firma del Tratado de París en 1783, los trece estados rebeldes vieron la necesidad de establecer una capital federal que sirviera de sede para las instituciones gubernamentales de los Estados Unidos. Tras varios años de discusión, en los que el Congreso se reunía en distintas ciudades, entre ellas Filadelfia o Nueva York, y no escasas tensiones entre los estados del sur y los del norte, en 1790 se aprueba la Residence Act que permite la erección de la capital federal en unos terrenos a ambos lados del rio Potomac donados por los estados de Maryland y Virginia, y que incluían los puertos de Georgetown (actualmente un barrio del DC) y de Alexandria, respectivamente; si

in his paper Denise Mina, Ian Rankin, Paul Johnston, and The Architecture Crime

Habitualmente asociada a las grandes urbes americanas – Los Ángeles, Chicago, San Francisco, Nuev... more Habitualmente asociada a las grandes urbes americanas – Los Ángeles, Chicago, San Francisco, Nueva York-, la ficción criminal actual ha ampliado sus escenarios a lugares hasta ahora poco habituales, por no decir inéditos, en el género. No sólo podemos hablar de su aparición en países en los que no existía una tradición de este tipo de ficción, si no también de su extensión a otras ciudades de tamaño medio, en Estados Unidos y las Islas Británicas, que hasta el momento tenían escasa relevancia. Pretendemos analizar la importancia de la localización en la ficción criminal, así como las causas que la han convertido en un fenómeno global, razones que explican la proliferación de escenarios alternativos en esta literatura. Hasta épocas muy recientes, la localización desempeñaba un papel secundario dentro de la ficción criminal. Se consideraba que la caracterización o el desarrollo de la trama eran los aspectos más relevantes en este tipo de literatura. Sin embargo, en los últimos años, se ha ido imponiendo la idea de que la localización es un elemento tan decisivo como los dos mencionados anteriormente. La proliferación de escenarios poco habituales en el género refuerza esta idea. Y no podemos descartar el hecho de que, para muchos lectores, los escenarios de la ficción criminal actúan como elemento de atracción en igual medida que una trama bien construida o unos personajes interesantes.