89176.pdf (original) (raw)

Positivismo de Augusto Comte

En el año 1844, Augusto Comte publicó el Discurso sobre el espíritu positivo, como introducción a un "Tratado filosófico de astronomía popular", aludido muchas veces en el texto. Se trata de un breve libro que encierra vigorosamente lo esencial del pensamiento comtiano. Es una obra de madurez, posterior al "Sistema de filosofía positiva", que recoge sus momentos fundamentales y los agrupa en páginas escasas y densas.

EL APRENDIZ DEL HECHICERO: CRÍTICA DE HENRY THOREAU AL POSITIVISMO

El aprendiz del hechicero: Crítica de Henry Thoreau al positivismo . Las Jornadas de Investigación para Profesores de Sociología, Centro de Estudios Sociológicos. UNAM. México., 2013

En el poema de Goethe titulado Der Zauberlehrling (El Aprendiz del Hechicero), escrito en 1797 y popularizado por el largometraje animado Fantasía de Walt Disney, se describe cómo el aprendiz del hechicero toma sin consentimiento el gorro mágico del maestro para ordenar a una vieja escoba a que realice sus deberes: tomar los baldes con agua para verterlas en una fosa. Al comienzo de la historia todo va viento en popa, pues las pocas habilidades mágicas del aprendiz le dan plena confianza de que el embrujo está bien ejecutado. Sin embargo, cuando la fosa ya se ha llenado, la vieja escoba continua realizando su tarea sin detenerse. El aprendiz entonces le ordena que interrumpa su labor inmediatamente sin tener éxito alguno. No hay palabras ni hechizos que la detengan, sigue firmemente cumpliendo con su labor. El aprendiz con desesperación toma un hacha para destrozar a la vieja escoba. Finalmente lo logra -dando un respiro profundo de alivio que sale de su ser-, sin darse cuenta que las astillas de la vieja escoba han cobrado vida, multiplicando el hechizo en todas ellas. Goethe en su poema describe este momento: "De cada parte nace un nuevo ser". Ahora decenas de escobas efectúan la tarea de llenar la fosa, todas al mismo tiempo. El aprendiz ha creado un monstruo y ahora sucumbe en medio de ríos de agua sin detener su propio embrujo.

Sobre El positivismo de Comte

Introducción Los seres humanos, cargados de dinamismo y estando siempre en movimiento, cambian conforme pasan los años. Esto no solo se da en lo físico y particular, sino que las generaciones de toda la humanidad también cambian y se renuevan y con ellas las maneras en las que los hombres se desarrollan también varían. Las nuevas formas de vivir traen consigo nuevas formas de pensamiento con maneras distintas de ver el mundo y tratar de darle respuesta a las nuevas cuestiones que surgen. Una época de múltiples cambios, tanto sociales como ideológicos, fue el periodo comprendido entre finales del XIX e inicios del XX. Esta época se vio permeada de los nuevos avances que traía consigo la revolución industrial y el desarrollo de las ciencias, de manera especial las naturales. El método utilizado para el estudio de estas se aplicó no solo en ellas, sino que se quiso implementar en la filosofía como forma de dar respuesta a problemas sociales, desde la óptica de lo demostrable y palpable de las ciencias. No se pensaba en buscar respuestas de maneras meramente metafísicas, basadas en Dios, como fue el caso de la Edad media, y la cuestión tampoco era de índole cognoscitiva como tantos debates tratados en la Edad moderna, sino que más bien se quería hacer practica y eficaz a la filosofía, usándola como instrumento para resolver los problemas que realmente deben importarle al hombre: los problemas sociales. Gracias a este nuevo enfoque, con la primacía de las ciencias, surge el positivismo, cuyo padre es el muy conocido filósofo Augusto Comte. La obra de este se dedicó a explicar de manera detallada lo que el mismo llamó " filosofía positiva " la cual constituye el pilar de la nueva corriente que con él surgía llamada positivismo. Entre todos sus escritos destaca el " Curso de filosofía positiva " , la cual es su obra cumbre y con la que mostró al mundo sus intenciones de aplicar la filosofía, con base en la ciencia, a los conflictos de índole social. Este trabajo busca ahondar un poco más en el contenido de la mencionada obra, de manera especial su primera lección, con intenciones de ver y tratar de entender lo que en ella se postula. La importancia de esto radica a que ayudará a comprender las bases que sostienen el positivismo y lo que trajo después de ser propuesto. Se trata de ver los aportes que trajo a la filosofía y a la sociedad, en conjunto con las reacciones que produjo, teniendo presente, además, las fortalezas y las limitaciones que puedan presentarse, basándonos en análisis propios y en los argumentos de autores posteriores a Comte.

H. L. A. Hart y el "punto de vista interno": entre la caja de Pandora y la caja negra del positivismo

Revista Telemática de Filosofía del Derecho, 2017

Es difícil sentarse a escribir acerca de un grande como Hart, y más aún sobre Hart y su célebre Postscript al El concepto de Derecho. Cualquiera que conozca mínimamente la filosofía jurídica de las últimas décadas sabe que en el Post Scríptum se anudan casi todos los hilos de los múltiples debates que han preocupado a la teoría jurídica del siglo XX: la naturaleza y la tipología de las normas, los requisitos de la validez, la noción de sistema jurídico, la existencia o inexistencia de lagunas, la capacidad creadora del juez, el problema de la obediencia al derecho, la vigencia u obsolescencia del positivismo jurídico, y un largo etcétera de asuntos que siguen dando abundantes quebraderos de cabeza a los filósofos del derecho. Además, resulta que el Postscript parece delimitar dos periodos en el pensamiento de Hart -según algunos-y, en todo caso, es el punto de inflexión que dio lugar al enésimo de los cismas que ha experimentado el positivismo jurídico desde sus orígenes: el que divide al positivismo incluyente y el excluyente. Creo que hay pocos temas que hayan provocado una catarata bibliográfica tan abundante como éste. Por si fuera poco, lo intrincado de la polémica desatada en torno a este último punto, que ha alcanzado grados bizantinos 1 , hace aún más difícil decir algo medianamente interesante sobre el Postscript.

Literatura moralista, educación liberal y grandes libros. La contribución del reverendo Frederick William Farrar (1831-1903)

Historia de la Educacion, 2024

Una de las expresiones originarias del llamado movimiento de los grandes libros que menos atención ha recibido ha sido aquella en la que sobresale el cometido religioso de la lectura y en la que puede apreciarse distintivamente cómo la fascinación y la fe victorianas en la literatura responden al empeño por dar con un sustituto espiritual y moral de la religión con el que poder contrarrestar su creciente desarraigo e influencia en la sociedad. A este espíritu corresponde la contribución de Frederick William Farrar, quien no solo reconocería la santidad de las obras maestras de la literatura, sino que, a la vez, siguiendo una larga tradición según la cual la asimilación de la literatura pagana cumplía un papel propedéutico en la edu-cación del cristiano, verá en la concurrencia con los grandes libros la antesala para el encuentro con los Libros de Dios.

Horkheimer, lector del positivismo. Un análisis crítico de la interpretación horkheimeriana del positivismo en sus textos tempranos

Revista de filosofía DIÁNOIA

Este trabajo reconstruye la caracterización de “positivismo” en tres obras centrales de Horkheimer. Se afirma que, en el uso del término, Horkheimer incurre en una doble equivocidad, pues lo utiliza indistintamente para referirse al positivismo decimonónico y al del siglo XX; además, no reconoce las diferencias internas entre las posiciones de los positivistas contemporáneos. Asimismo, se muestra que muchos rasgos que se consignan como propios del positivismo del siglo XX no tienen justificación en los textos de esa tradición, de manera que la categoría horkheimeriana de “positivismo” se convierte en una entidad interpretativa respecto de la cual la Escuela de Fráncfort se considera antagónica. A partir de lo anterior se realiza una crítica a las interpretaciones del autor.