Jetsun Drakpa Gyaltsen: Separarse de los Cuatro Apegos. (original) (raw)

Los 4 Pelagatos

Los 4 pelagatos, 2023

La movilización electoral está indiscutiblemente ligada a factores sociológicos, psicosociológicos y económicos de la democracia, que alimentan las razones que llevan a los ciudadanos a ejercer su derecho de participar en las elecciones por diferentes motivos. Muchas veces, el vehículo más eficaz en distribuir el mensaje de los factores mencionados, van encapsulados con humor.

El capítulo de los Cuatro Grandes Reyes del Suvarnabhasa

En ese momento el gran rey Vaisravana, el gran rey Dhrtarastra, el gran rey Virudhaka, y el gran rey Virupaksa, se levantaron de sus asientos, pusieron sus mantos sobre un hombro, pusieron sus rodillas derechas en el suelo y haciendo un gesto de reverencia con sus manos hacia el Señor Buda, le hablaron de este modo:

Las cuatro “Yavitas”

Boletín de Historia de las Geociencias en Venezuela, 2019

Se presenta evidencia histórica de la existencia de al menos cuatro lugares establecidos en la cuenca de los ríos Guainía (alto Río Negro) y Atabapo, con el nombre de “Yavita”, los cuales aparecen en la literatura con diversas grafías. Estas denominaciones incluyen: tres misiones o poblados en la cuenca alta del río Atabapo, y otra, la más antigua de acuerdo a la literatura, en el alto río Guianía. La primera “Yavita” considerada en el presente ensayo fue fundada por los portugueses en un curso de agua homónimo, y usada como un arrais o sitio para mantener esclavos indígenas antes de su traslado a otras regiones de Brasil. Este lugar estuvo localizado probablemente en la cuenca del río Guainía, aguas arriba de su confluencia con el Caño Pimichín. La segunda y tercera “Yavitas” fueron citadas por Humboldt en su Relation Historique y corresponden a poblados asentados en el caño Tuameni o Tuamini, afluente del río Temi en su margen sur. Este último, junto con el río Guasacavi y el río Atacavi, confluyen aproximadamente en un mismo sitio, inmediatamente aguas arriba del poblado de Santa Cruz, para formar el río Atabapo. De acuerdo a los relatos de Humboldt, de estas dos Yavitas, la primera se encontraba ubicada aguas arriba de la Yavita que visitaron los famosos exploradores. A principios del siglo XIX “Yavita” fue reasentada en la rivera sur del río Temi, aguas abajo pero cerca de su confluencia del con el caño Tuameni, lugar en el que se encuentra en la actualidad. Igualmente, dada la estrecha relación histórica y geográfica entre la cuenca alta del río Atabapo, donde han estado asentadas tres de las “Yavitas”, con la cuenca del río o caño San Miguel o caño Conorochite, inmediatamente al sur y afluente izquierdo del río Guainía, la presente contribución también reporta información proveniente de los trabajos de varios autores sobre la etnografía, la flora y la geo-historia del “caño” San Miguel.

Ajahn Sumedho Las Cuatro Verdades Nobles

Un puñado de hojas Una vez el Bendito estaba viviendo en un bosque de árboles simsapa en Kosambi. Tomó un puñado de hojas en su mano y les preguntó a los Bhikkhus, '¿Qué opináis, Bhikkhus?, ¿qué son más, las pocas hojas que he cogido en mi mano o las de los árboles del bosque?' 'Las hojas que el Bendito ha cogido en su mano son pocas, Señor, las del bosque son muchas más'. 'Así también, Bhikkhus, las cosas que he conocido mediante el conocimiento directo son más; las cosas que os he contado son sólo unas pocas. ¿Por qué no las he contado? Porque no traen beneficio, ni avance en la Vida Santa, y porque no llevan a la serenidad, a la extinción, a la cesación, a la calma, al conocimiento directo, a la iluminación, al Nibbana. Esta es la razón por la cual no las he contado. ¿Y qué es lo que os he contado? Esto es sufrimiento; este es el origen del sufrimiento; esta es la cesación del sufrimiento; este es el camino que lleva a la cesación del sufrimiento. Eso es lo que os he contado. ¿Por qué os lo he contado? Porque trae beneficio, y avance en la Vida Santa, y porque lleva a la serenidad, a la extinción, a la cesación, a la calma, al conocimiento directo, a la iluminación, al Nibbana. Por eso, Bhikkhus, que vuestra tarea sea esta: esto es sufrimiento; esto es el origen del sufrimiento; esta es la cesación del sufrimiento; este es el camino que lleva a la cesación del sufrimiento'.

Delors Jaques Los cuatro pilares

El siglo XXI, que ofrecerá recursos sin precedentes tanto a la circulación y al almacenamiento de informaciones como a la comunicación, planteará a la educación una doble exigencia que, a primera vista, puede parecer casi contradictoria: la educación deberá transmitir, masiva y eficazmente, un volumen cada vez mayor de conocimientos teóricos y técnicos evolutivos, adaptados a la civilización cognoscitiva, porque son las bases de las competencias del futuro. Simultáneamente, deberá hallar y definir orientaciones que permitan no dejarse sumergir por la corriente de informaciones más o menos efímeras que invaden los espacios públicos y privados y conservar el rumbo en proyectos de desarrollo individuales y colectivos. En cierto sentido, la educación se ve obligada a proporcionar las cartas náuticas de un mundo complejo y en perpetua agitación y, al mismo tiempo, la brújula para poder navegar por él.