Conservación y sostenibilidad de los ecosistemas de alta montaña en Latinoamérica: Consideraciones a partir del estudio de la vegetación paramuna colombiana (original) (raw)

2010, Memorias Foro Electrónico 'Biodiversidad en Montañas'

No existe una única solución definitiva ante la problemática ambiental que enfrenta la región Andina. Ningún mecanismo de conservación puede ser realmente efectivo sin asegurar la viabilidad social y económica de las poblaciones humanas que allí habitan, no obstante, sus formas de subsistencia no son sostenibles en éstos ambientes tan frágiles si no logran entablar un equilibrio con su entorno, respetando los espacios naturales que deben ser preservados. La mejor estrategia a adoptar debe ser combinada y adaptable: los diversos sectores de la sociedad deben estar dispuestos a aportar y abiertos a aprender, rectificar y conciliar. El enfoque debe ser claro: imitar los sistemas biológicos de cada región, probados localmente tras miles de años de experimentación de la naturaleza, por lo cual debe procurarse un conocimiento detallado de la ecología paramuna para poder hacer un manejo apropiado del mismo. Cualquier clase de uso de los recursos debe estar acorde con las características de cada región de montaña, sin ir más allá de su propia capacidad: debe considerarse seriamente la restricción de las explotaciones mineras y las grandes obras de infraestructura, las labores agropecuarias y las plantaciones forestales, fomentando el aprovechamiento racional de especies no tradicionales, la exploración de usos potenciales de la biodiversidad y el turismo ecológico según la capacidad de carga respectiva. La preservación de ecosistemas estratégicos es una de las claves, especialmente aquellos establecidos en sectores de recarga de acuíferos y regulación de cauces, o los que representan núcleos de concentración de organismos y corredores biológicos. Aunque la desaparición de ciertas especies y la transformación de sus ecosistemas será inevitable como consecuencia de los fenómenos globales asociados al cambio climático, asegurar la permanencia de los espacios naturales permitirá su conservación y su adaptación de acuerdo a su propia evolución, acudiendo a la capacidad de adaptación y recuperación propia de las comunidades y de las especies que las conforman.