La politización de la " cultura " (original) (raw)

La politización de la " cultura " 1

E n los primeros años de la antropología social moderna, los antropólogos anunciaron a la Sección H de la Asociación Británica sus hallazgos y avances teóricos más importantes para el Avance de la Ciencia. Como presidente de esta Sección en 1997, elegí encarar los desarrollos contemporáneos de uno de nuestros más antiguos conceptos, "cultura", como una manera de continuar esa tradición. 3 ¿Por qué ser tan audaz como para involucrarse con una palabra sobre la cual Williams (1976: 87) declaró que era una de las dos o tres más complicadas del idioma inglés y que en la antropología británica, norteamericana y europea ha tenido historias complejas, disputadas y muy diferentes? Para mediados de siglo, Kroeber y Kluckhohn habían encontrado 164 definiciones en su famosa revisión de lo que los antropólogos querían significar por cultura (1952: 149). Para 1970, cuando la antropología cultural se estableció en EE.UU. como uno de los cuatro campos de la antropología, en la antropología británica el término 'cultura' casi había desaparecido de vista. En los últimos diez años, con la ayuda de los estudios culturales, la 'cultura' ha recuperado el centro de la escena en la antropología británica. El objetivo de este artículo no es hacer un recuento de cuántas definiciones de 'cultura' han generado los antropólogos hacia fin de siglo. Más bien, el artículo profundiza en la observación de Kroeber y Kluckhonn de que "la aparición de estas [definiciones] en el tiempo es interesante -dado que de hecho la distribución de todo fenómeno cultural ya sea en el espacio o el tiempo revela significación" (ibid.). El objetivo es tratar la prominencia (o 'distribución' en términos de Kroeber y Kluckhonn) de la 'cultura' en los '90 como un fenómeno cul-tural en sí. ¿Cuál es el significado de la reciente reaparición de la cultura como un concepto central en la antropología británica? El asunto no está confinado al debate disciplinario interno. En la última década, políticos y tomadores de decisiones han introducido el término 'cultura' en el discurso de diferentes 'campos' (Bordieu 1991) de la sociedad contemporánea. A menudo, los tomadores de decisiones y los comentaristas de los medios atribuyen legitimidad a sus discursos refiriéndose a (la) 'cultura, en un sentido antropológico' -una frase que evita toda revisión al pretender que hay un significado de cultura (el suyo) que es a la vez demasiado autoevidente como para que garantice la explicación y demasiado hondo como para que se sumerjan en él los no antropólogos. ¿En qué forma los tomadores de decisiones (ya sean antropólogos o que se atribuyan legitimidad desde la antropología) están politizando la 'cultura' y desplegando el concepto en una gama de territorios de poder? ¿Cómo pueden los antropólogos usar sus nuevos enfoques teóricos para explorar y revelar los efectos de los usos actuales de este concepto en la política contemporánea?

De la cultura en las politicas publicas

Reseña del libro "Antropología y acción pública" Martínez Espinoza, Manuel Ignacio. (2015) “De la cultura en las políticas públicas”, En Convergencia. Revista de Ciencias Sociales. Vol. 22. Núm. 69. Toluca: Universidad Autónoma del Estado de México. Pp. 235-241. Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=10540670010

La cultura en el PAN

La gestión cultural de Manuel Gómez Morín es la faceta menos explorada de su inagotable trayectoria. Curiosamente la faceta que con más pasión desarrolló. Lo hizo desde la redacción de más de un diario, desde las páginas de diferentes revistas, desde la gestión de diversas publicaciones editoriales y su relación con los intelectuales de la época. En el presente trabajo se describe, además de lo antes mencionado, el impulso que dio Gómez morín y los prefundadores del PAN a la primera organización musical del país (la Orquesta Sinfónica de México).

Teatro comunitario y procesos de politización de la cultura

Teatro comunitario y procesos de politización de la cultura, 2020

El artículo presenta algunas líneas de investigación vinculadas al campo de las políticas culturales, el arte para la transformación social y el teatro comunitario en Buenos Aires. El análisis retoma el caso de dos grupos de teatro comunitario para estudiar cómo estos actores construyeron un proceso de definición de esta práctica artística diferenciándose de otras propuestas teatrales y culturales de la ciudad. A partir de esto, se indaga en las formas de demanda colectiva que estos grupos fueron desplegando en torno al reconocimiento estatal de la especificidad de sus proyectos. Se abordan nociones acerca de “autonomía”, “independencia” y “autogestión” que se fueron elaborando en estos procesos y que resultan de interés para reflexionar acerca de los procesos de politización de la cultura que vienen desencadenándose y que replantean los vínculos entre agentes estatales e iniciativas culturales independientes.

El problema de la cultura

El problema de la cultura, 2010

Un análisis de la categoría "cultura" visto desde la ciencia y desde la filosofía

La cultura politica

Éste es un estudio sobre la cultura política de la democracia y las estructuras y procesos sociales que la sostienen. La fe de la Ilustración en el inevitable triunfo de la razón y de la libertad del hombre ha sido sacudida dos veces en las últimas décadas. El desarrollo del fascismo y del comunismo, después de la primera guerra mundial, suscitó serias dudas acerca de la inevitabilidad de la democracia en Occidente; y aún no podemos estar seguros de que las naciones del continente europeo lleguen a descubrir una forma estable de proceso democrático que se acomode a sus instituciones sociales y a su cultura particular, sólo podemos confiar en que conjuntamente descubrirán una democracia europea.

La Cultura, el culturalismo y lo político

Si el desarrollo del conocimiento acerca de la cultura nos coloca frente a la etimología misma de la palabra del latín cultura, cultus, “cultivo”, y frente a entendimientos básicos aceptados tales como la producción material de objetos “cultos” que conforman el mundo del artista y el gusto por las bellas artes, por un lado; y de otro, grupos con estructuras sociales que comportan conjuntos de saberes, creencias y hábitos, incluyendo su producción material; además de muchos otros acercamientos a su interpretación, son también muchos los interrogantes que se suscitan sobre el papel que la cultura cumple en la sociedad que la produce, y en sus transformaciones. Particularmente para éste ensayo, la pregunta que se plantea es sobre las formas de relacionamiento de la cultura con diversos ámbitos de las practicas sociales, como lo es, entre otros, el ámbito político.

La cultura política en el kirchnerismo: dos hipótesis sobre la politización

Revista Sudamérica, 2014

La propuesta de este artículo es analizar los cambios ocurridos en la cultura política en el kirchnerismo, específicamente en términos de la politicidad. Para esto se analizarán las trayectorias organizacionales y los debates generados en el espacio multiorganizacional militante a partir de dos hipótesis. La primera: el kirchnerismo como posibilidad identificatoria; la segunda: la demanda del salto a la política. El argumento central es que en una primera temporalidad (2003-2006) se produjo un proceso de politización manifestado en la emergencia de una nueva generación militante, de discusiones y propuestas por parte de las organizaciones. Este aparejó la formulación de la demanda del salto a la política que implicaba no sólo el otorgamiento de reivindicaciones de inclusión económica, sino fundamentalmente la constitución como sujeto político. Esta por motivos diversos no puedo concretarse, conllevando la dispersión del espacio militante kirchnerista.

El malestar de la cultura

Cómo alguna vez tuvo Freud la pertinencia de denunciar el malestar general que se vive dentro de nuestra cultura occidental moderna, la intención primera de nuestra patrulla, Macuira, es la de realizar un ejercicio comparativo entre la cultura de los muchachos que integran la patrulla, y la de los habitantes de la Guajira, con el fin de llegar a conclusiones relevantes y profundas sobre la cultura del ser humano, en general. Sin embargo, tal aproximación resultaría ridícula si partiéramos de la base de que la cultura de nosotros es la misma de nuestros padres. Estaríamos engañándonos gravemente si aseveráramos que para nosotros nada ha cambiado desde quizá mediados del siglo pasado, porque sabemos que cada aspecto que compone la cultura se ha visto permeado en mayor o menor medida por el mundo globalizado en el que vivimos. La tecnología ha resultado ser un arma de doble filo en la conformación moderna del individuo. Es necesario, entonces, hacer un primer pronostico del estado en que se encuentra nuestra propia cultura, qué ha cambiado, qué ha prevalecido, qué somos. Tendiendo en cuenta lo anteriormente dicho, procederemos a hacer un análisis de lo que es nuestra propia cultura, basándonos en los seis ejes que fundamentan el énfasis de nuestra patrulla, que son, a saber: ociosidad, cotidianidad, familia, escuela, grupo social y proyección. Partamos, pues, del eje que se refiere a la cotidianidad. Entendemos la cotidianidad como la serie de acciones y costumbres recurrentes en nuestro diario existir en este mundo. Lo cotidiano es aquello de todos los días. En nuestro diario vivir, hay acciones que llevamos a cabo de manera repetitiva, pero nuestra rutina varía dependiendo del día de la semana y de la cercanía con el fin de semana, espacio de máxima distención. La cotidianidad ha cambiado drásticamente por la fácil llegada de la tecnología a los hogares colombianos. El hecho de que se haya hecho mas fácil adquirir un equipo de sonido, un televisor, un Play Station o un celular ha hecho que la cotidianidad cambie drásticamente. El siguiente aparte del cuento Un día de estos, de Gabriel García Márquez, nos ayuda a crear una imagen mental de lo que solía ser la cotidianidad en un mundo sin tanta tecnología bombardeando el hogar: " Después de las ocho hizo una pausa para mirar el cielo por la ventana y vio dos gallinazos pensativos que se secaban al sol en el caballete de la casa vecina. Siguió trabajando con la idea de que antes del almuerzo volvería a llover. " Los divertimentos que componen la cotidianidad en la que estamos sumergidos han dejado de ser individuales, para convertirse en profundamente dependientes de la tecnología. Si bien la cotidianidad de los muchachos sigue siendo, en su mayoría, asistir al colegio y volver a casa, la cotidianidad esta cundida de momentos de ocio en los que se busca el contacto enfermizo con la tecnología, mayormente redes sociales. La devoción a una tarea por mas de veinte minutos parece ser un difícil reto, pues la necesidad de estar en constante contacto con los demás por medio de las redes sociales ha crecido drásticamente en los últimos años. La cotidianidad moderna requiere de actividades muchísimo mas cortas, que permitan al individuo cambiar de estado continuamente. Zygmunt Bauman propone un paralelo supremamente acertado para describir