Jacobo Borges. Treinta años de creación (original) (raw)
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La construcción de la biblioteca total, a partir de traducciones y cuentos publicados en las revistas literarias Proa y Sur.
2003
Borges señaló que se podrían escribir innumerables biografías de una persona que destacaran hechos diferentes, de modo que no se pudiera saber que el protagonista es el mismo, pero sus biógrafos parecen empeñados en recordarnos los mismos hechos. En parte, ello se debe a que todas estas biografías se apegan demasiado al modelo tradicional, basado en la laudatio latina -primero la familia y los antepasados, luego su carrera pública y sus hazañas, pero también su vida privada y familiar, y finalmente las virtudes por las que su recuerdo se debe conservar para las generaciones futuras; y en parte, a que la leyenda borgeana se basa en ciertos acontecimientos fundamentales. Las biografías debido a esto admiten una lectura transversal que con frecuencia puede resultar divertida. Esto implica que para mí estas biografías tienen un interés propio. Se trata de un género literario, poco estudiado es cierto, como la autobiografía y las memorias o el relato de viajes. En el caso de Borges, se h...
A ochenta años del Poema conjetural de Borges
"Poema conjetural", de Jorge Luis Borges, fue publicado originalmente en el diario La Nación de Buenos Aires el 4 de julio de 1943 e incluido finalmente en el libro El otro, el mismo (1964). A ochenta años de su publicación original, en lo que sigue se ofrece una breve reflexión sobre el texto.
Monteagudo, nº 24, 2019
Max Aub señaló en cierta ocasión que uno era de donde había hecho el bachille-rato y por tanto él, que lo había cursado en Valencia, se sentía valenciano y en con-secuencia español. Poco tenía que ver, a instancias genealógicas, el hecho de haber nacido en París, hijo de padre alemán y madre francesa. Jorge Luis Borges cursó sus estudios medios en Ginebra y pese a que nadie duda de su argentinidad lo cierto es que sus restos reposan en la actualidad en aquellas tranquilas tierras centroeuropeas. Las experiencias acumuladas en la adolescencia, sean vitales o formativas, moldean la personalidad de cualquier individuo y por supuesto de cualquier escritor: recorde-mos a este respecto el magistral Retrato del artista adolescente abocetado por James Joyce en el que se trata de estos pormenores con lúcida penetración. Borges cursó varios años de su bachillerato en fructuoso contacto con la lengua alemana y lejos de servirse de ella como mero instrumento académico, ahondó en sus profundidades por medio del estudio de su literatura, atraído especialmente por las novedades que aportaba un nuevo movimiento artístico conocido como expresio-nismo. Tras su estancia ginebrina, Borges se trasladó junto a su familia a España y aquí, en el tránsito de la década de los diez a los veinte, recorrió diversas ciudades: Palma de Mallorca, Sevilla, Madrid, etc. Por entonces emerge en suelo español un peculiar movimiento vanguardista conocido como ultraísmo, en el que se enrola con juvenil ardor. El ultraísmo se alimenta de las distintas corrientes renovadoras que se desenvuelven por Europa, especialmente del creacionismo y del futurismo y, en menor medida, del dadaísmo y del expresionismo. El principal responsable de que la salsa ultraica recibiera algún condimento tudesco fue justamente Borges, que no solo tradujo algunos textos de aquella orientación al español, sino que él mismo escribió poemas de acuerdo a sus cánones. De la imantación expresionista, presente en el primer Borges, se ocupa el investi-gador argentino, radicado en Hamburgo, Carlos García, 1 uno de los pioneros en el es-1 Carlos García, El joven Borges y el expresionismo literario alemán, Córdoba (Argentina), Universi-dad Nacional, 2018 (1ª ed., 2015), 229 págs.
Borges entre la tradición y la invención literaria
Verba Hispanica, 2017
Si bien es cierto que la obra de Borges se ha leído como parte de la cultura universalista, en especial de la literatura occidental (Bloom, 1994) y con la acusación de cosmopolitismo evasionista (Caballero, 1999), el autor es inescindible del mundo que lo une a las tradiciones culturales rioplatenses y al siglo XIX, relación que marca una visión nueva de la literatura argentina, colocando, en un extremo, la tradición gauchesca y, en el otro, la teoría del intertexto (Sarlo, 2007).
Transcripción literal - notas y apuntes - del filme documental "Harto The Borges" tal y como fuera exhibido originalmente. La transcripción incluye los pasajes de Borges durante la entrevista realizada con motivo de su octogésimo aniversario, y aquellas grabadas con motivo del documental. Wikipedia: "Harto The Borges is a documentary film by Eduardo Montes-Bradley. Harto The Borges explores the narcissistic side of the author of El Aleph, his frequent and often criticized comments to the press, his distinctive and gentle ironies. Harto The Borges had a theatrical release in Buenos Aires in September 2000, and was well received by the critics.[3] Since then has been frequently exhibited at forums, campuses, and film festivals. On October 4, 2011, Harto The Borges was made available to the general audience in Argentina through the On Line version of Revista Cultura Ñ, (Diario Clarin) in Buenos Aires. The film was released alongside an article in which the director views the film ten years after its premier at the Cine Cosmos."
L a literatura argentina actual no tiene escritores borgeanos. Busquen el estilo, el tono, la prosa, el programa narrativo, los temas que hicieron célebre al maestro y no los encontrarán en ningún lado. Es una suerte que deberíamos celebrar. A fines de los años 60, cuando Borges había dejado de ser un escritor controvertido, capaz de dividir aguas con su literatura, para volverse irresistible y unánime, muchos escritores, que no eran necesariamente de derecha ni estaban ligados a la "cultura de clase" de la que Borges era de algún modo el estandarte, sembraban sus propios textos, juveniles y aun vanguardistas, con personajes que "fatigaban bibliotecas", con "lámparas ciegas", con ironías y erudiciones de segunda mano, semillas espontáneas de un borgismo desolador que, créase o no, también contaminaba los artículos con los que el ala más moderna y progresista del periodismo cultural de Buenos Aires exaltaba la primera configuración literaria que se daba el lujo de brillar dándole la espalda a Borges: el llamado boom de la literatura latinoamericana. Créase o no, en las páginas de la revista porteña Primera Plana, house organ oficial del movimiento, también García Márquez, Vargas Llosa o Cortázar "deparaban asombros" y jugaban a "ser otros", macerados en las figuras retóricas más flagrantes del maestro, mientras se adherían a causas que el propio Borges sólo tomaba con pinzas y dando vuelta la cara: la causa de la Revolución Cubana, por ejemplo.