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El fantasma de la extrema derecha recorre Europa
Asuntos Públicos, 2009
En estos días, Europa y sus líderes han recordado la caída del muro de Berlín como un símbolo de la unidad democrática y la libertad que hoy impera en el viejo continente. Sin embargo, poco han hecho por recordar las similitudes que existen entre las condiciones existentes en el período previo a la llegada del fascismo a Europa y las actuales.
2020
Para ello, se trata de trascender la modernidad hacia la transmodernidad, en el proceso de constitución del sujeto transmoderno. Palabras clave: enemigo y unidad; globalización de la modernidad capitalista neoliberal ; Cálculo de vidas; transmodernidad.
(2017) Podemos y sus fantasmas, in: Pasos a la izquierda
Exploración de un territorio cuyos puntos cardinales es forzoso resituar, redefinir. Tanteos. Cruces de caminos http://pasosalaizquierda.com Podemos y sus fantasmas. Breve crónica de Vistalegre II Revista: Pasos a la izquierda Nº8 (Marzo 2017) Por CONRAD LLUIS MARTELL ¡Unidad, Unidad, Unidad!-desde el primer minuto del segundo congreso de Podemos, Vistalegre II, el mensaje de las bases resonó inequívoco. Después de meses de luchas internas, la militancia deseaba la pacificación interna. No le faltaba razón: todo ese poderío estratégico y movilizador que habían permitido a un partido nacido hace justo tres años, bajo el lema "Convertir la indignación en cambio político", transformarse en una de las mayores fuerzas a la izquierda de la socialdemocracia en Europa, cosechar cinco millones de votos (21% del electorado) o conquistar los grandes municipios del país (entre ellos Madrid y Barcelona) parecían disiparse en la cruenta confrontación de dos corrientes alejadas entre sí. En vísperas de Vistalegre II, Podemos estaba fracturado entre pablistas y errejonistas. Dos bandos con visiones sensiblemente diferentes sobre el Podemos del futuro. Pablo Iglesias y los suyos deseaban un Podemos focalizado en la movilización social, en una línea política claramente de izquierdas, dura con las demás fuerzas parlamentarias y que interpelase directamente a las clases populares, es decir: al tercio más empobrecido de la sociedad española, mediante la lucha social y una retórica directa, en ocasiones hasta grosera 1. En cambio, los partidarios de Íñigo Errejón-el 'estratega' del partido-apostaban por continuar la línea del primer Podemos (2014-2015), aquella formación que rehuía la etiqueta de "izquierda radical" y apostaba por un populismo transversal, centrado en la dicotomía de las élites contra el pueblo, con Podemos como portavoz de este último. De esta forma, se apostaba por seguir navegando sobre el nuevo sentido común que instaló el ciclo de protesta del 15-M (2011-2013): se trataba de rearticular las demandas indignadas, tales como la crítica a la corrupción, la apuesta por la regeneración democrática, la defensa del estado de bienestar y el rechazo de la austeridad-y evitar temas más controvertidos (y minoritarios) como el debate sobre la forma de estado (monarquía o república), la memoria histórica o el anticapitalismo radical. En conversación con el autor un día antes de Vistalegre II, Juan Carlos Monedero, una de las manos derechas de Pablo Iglesias, sintetizaba las diferencias entre Errejón y Iglesias: "El planteamiento de Errejón es: representemos el 15M. No digamos nada que pueda molestar a los indignados, hablemos solo de marcos ganadores. Y a través del discurso, seduzcamos a las mayorías para que nos voten. En cambio, nosotros planteamos que hay que reconducir el 15M. Es decir, inyectar en el cuerpo social herramientas para convertir la indignación en política. Para generar una empatía social que sea capaz de construir mayorías 2 ." Pero lo que de hecho ocurrió en Podemos en los meses y semanas anteriores a Vistalegre II no
El fantasma de la historia nacional
Revista De La Universidad De Mexico, 2006
Edmundo O'Gorman tuvo la gentileza de escribir tantas páginas y tan llenas de contenido que cualquier estudioso de su obra tiene que trazarse algún plan para abordarla. No me encuentro en tal categoría, sin embargo, la influencia que ejerció en mi formación, muy probablemente sin saberlo, me coloca en la situación del atrevimiento por agradecimiento.
El fantasma de Marx recorre el siglo XXI
El fantasma de Marx recorre el siglo XXI: lucha de clases y fetichismo de la mercancía, 2021
La caída del Muro de Berlín evidenciaba claramente el paisaje político, económico y cultural que se estaba milimétricamente construyendo desde 1970 y que el crítico cultural Mark Fisher denominó como Realismo Capitalista. Este Realismo Capitalista imponía evocando a Raymond Williams una nueva estructura del sentir caracterizada por la existencia de un sentimiento generalizado de desamparo, incertidumbre y profunda rabia para un amplio conjunto de la población mundial, cuyo resultado trágico queda evidenciado con otra gran sentencia de Fisher: la lenta cancelación del futuro.
Las huellas de un fantasma. El Frente de Liberación Popular
Hasta fechas relativamente recientes, opiniones de antiguos miembros del Frente de Liberación Popular, pero no sólo ellas, habían señalado en la extensa bibliografía sobre la oposición al régimen franquista la ausencia de un estudio en profundidad sobre el Frente, el FLP o familiarmente el Felipe, ya que durante décadas su existencia sólo había aparecido de forma dispersa e inconexa; fragmentaria. El FLP, una de las primeras organizaciones de izquierda fundadas en España después de 1939, contenía en su seno diversas corrientes del pensamiento político entonces más en boga, que iban desde el reformismo cristiano o socialdemócrata hasta radicales versiones del marxismo, que empezaban a circular como fruto del triunfo de lejanas revoluciones y de luchas anticoloniales en el Tercer Mundo, lo cual ejercía una poderosa atracción sobre los jóvenes más inquietos surgidos de las generaciones posteriores a la guerra civil, que, en el FLP, entraron políticamente en contacto con miembros de las generaciones precedentes. Este fue uno de sus méritos, pues en el Frente pudieron convivir personas de distintas edades y de diferente adscripción ideológica. El "Felipe" sumó, pues, nuevas ideas y nuevas generaciones a la oposición a la dictadura, pero al mismo tiempo, se alejó de las formas políticas y organizativas de las corrientes ideológicas anteriores a la guerra civil-el anarquismo, el socialismo y el comunismo-, aunque conservó algo de ellas. El "Felipe", como otros grupos europeos o americanos similares, fue un producto de su época, algo nuevo y distinto, propio del ambiente político e intelectual de los años cincuenta y sesenta y de las peculiares circunstancias de este país. El Frente, cuya existencia formal transcurrió entre 1958 y 1969, no había sido del todo olvidado, pues asomaba aquí y allá, como un fantasma, en artículos, recuerdos, crónicas, entrevistas o novelas; aparecía de refilón, pero no con la importancia suficiente como para merecer una investigación de tipo histórico digna de tal nombre. Esa carencia ha sido un efecto, entre otros, de la dificultad de indagar en la clandestina, agitada e interrumpida trayectoria de tres organizaciones de distinta entidad, confederadas a escala nacional, en lo que permitían las circunstancias, como fueron el Frente de Liberación Popular (FLP), el Front Obrer de Catalunya (FOC) y el frente socialista vasco Euskadiko Sozialisten Batasuna (ESBA). Los tres frentes tuvieron trayectorias marcadas por las dificultades impuestas por la dictadura a la disidencia, por la represión policial y judicial, por la detención y encarcelamiento de militantes, el descabezamiento repetido de su plana mayor y el reemplazo de dirigentes; así como por la renovación generacional derivada de las sucesivas levas de adheridos, la diferente implantación social y territorial, la diversidad de ideas en su interior y la variación de sus ejes políticos a lo largo del tiempo.