CONSCIENCIA, ESTRATEGIA: VIOLENCIA (original) (raw)
E n 1962, Edgar Morin publica L'esprit du temps. Essai sur la culture de masse. Allí argumenta que la relación estética, que se desarrolló tardíamente en la historia occidental, restituyó al hombre una relación casi primaria con el mundo. Esa relación, a pesar de haber sido rechazada desde la infancia arcaica de la humanidad por duras necesidades prácticas, y de ser suplida históricamente por la reificación mágica, se traduce en el encantamiento del juego, del canto, de la danza, de la poesía, de la imagen y de la fábula, como mostraron Huizinga o Caillois; de manera que, asociados contradictoriamente, se reencuentran, en el arte, tanto en la participación primaria como en la ironía estética evolucionada, los dos niveles del hombre de la cultura de masas: el del anthropos universal y el del individualismo en vías de universalización, propio de la civilización moderna. En afinidad con las antiguas participaciones mágico-religiosas, por su carácter frecuentemente imaginario, Morin decía que las participaciones estéticas contemporáneas están emparentadas, por su mismo carácter profano, con las participaciones afectivas que rigen nuestras relaciones con los otros (afectos, odios, amores, etc.), o incluso con las grandes potencias de la vida (nación, patria, familia, partido, etc.). Sin embargo, la relación estética queda, también en este caso, claramente diferenciada por su falta de implicación práctica, física o vital inmediata (Morin 1965, 68).