LA FORMACIÓN Y EL DESARROLLO PROFESIONAL DEL PROFESORADO (original) (raw)

FORMACIÓN DEL PROFESORADO

Código: 33721 " Serán los profesores quienes, en definitiva, cambiarán el mundo de la escuela, entendiéndola " en: Stenhouse, L. (1987): La enseñanza como investigación. Madrid: Morata. PRESENTACIÓN El contenido de esta materia nos introduce en la complejidad de perspectivas y factores que concurren en la Formación del Profesorado. Se pretende ampliar la mirada hacia todo aquello que contribuye a construir el saber y la cultura docente: saberes sobre uno mismo, sobre aquello que se enseña, sobre cómo se enseña y como aprenden los alumnos, sobre el entorno social y cultural, sobre otros nuevos saberes que enriquecen el propio saber educativo… Saberes que arrancan de la reflexión sobre la práctica o de la experimentación de nuevas concepciones y reconstrucciones. Saberes, en definitiva, que entienden la teoría y la práctica como un punto de encuentro natural y necesario para acometer cualquier tipo de actuación educativa. La formación docente necesita ser repensada si se quiere establecer un diálogo permanente entre lo que acontece fuera de la escuela, los cambios que se producen en la organización de los saberes, en las representaciones simbólicas, en las formas de trabajo, en las comunicaciones y la actuación de los docentes en el aula.

INVESTIGACIÓN EDUCATIVA Y FORMACIÓN DEL PROFESORADO

En este artículo dirigido a formadoras y formadores del profesorado, así como a maestros y maestras, recojo parte de mis opiniones sobre algunos aspectos de la formación del profesorado tratando de destacar la confianza que los formadores de maestros debemos depositar en los programas de formación, y también cómo la investigación puede convertirse en un excelente recurso formativo en la formación inicial y permanente del profesorado. Casi todo ello procede de las satisfacciones y los sinsabores acumulados durante más de veinticinco años dedicados a la formación de jóvenes que deseaban ser maestras y maestros, jóvenes ilusionados tanto por el inicio de su experiencia universitaria como por sus aspiraciones por trabajar en la enseñanza. Estoy convencido de que, coincidiendo casualmente con el paso de siglo, se están produciendo unos cambios de tal magnitud que de inmediato la educación tal como la hemos vivido dejará de ser, y a buen seguro que será para una mayor exigencia técnica y humana. La experiencia vivida ha servido para evidenciar el enorme desajuste entre los esfuerzos invertidos y los resultados obtenidos, así como la lentitud de cualquier cambio ante la omnipresencia de resistencias manifiestas y latentes. Sea ésta una aportación más para convencer de la inutilidad del inmovilismo.

LA FORMACIÓN Y EL DESARROLLO DEL PROFESORADO: DE LA FORMACIÓN ESPONTÁNEA A LA FORMACIÓN PLANIFICADA

En los últimos años, desde principos de los ochenta, todo lo relativo a la profesión docente, su formación y su desarrollo profesional, ha gozado de un interés creciente y progresivo. Este hecho se ha visto reflejado, en todos sus niveles y grados, tanto por la profusión de trabajos aparecidos (libros, artículos, informes...) como por la organización de debates, congresos, jornadas... sobre la formación del profesorado, la cual, dentro del sector educativo, está recibiendo un tratamiento específico y está siendo motivo no únicamente de análisis pormenorizados sino también de preocupación y controversia dentro y fuera del sector. En este sentido, es notoria la preocupación de las administraciones por institucionalizar los procesos de formación (legislación, creación de estructuras, instituciones y servicios, preparación de personal especializado...).

REFLEXIONES GLOBALES SOBRE LA FORMACIÓN Y EL DESARROLLO PROFESIONAL DEL PROFESORADO EN EL ESTADO ESPAÑOL Y LATINOAMERICA

¡ Oh gran buey! ¡ Oh divino tiro del arado! ¡Descansa para volver a arar! ¿No revuelvas jovialmente los surcos! Tú que vas delante, conductor ¡arre! Curvados trabajamos para cortar tu pienso; Descansa ahora y cómelo, tú que nos alimentas. Olvídate, comiendo, de los surcos. ¡Come! Para tu establo, oh protector de la familia, Jadeantes, las vigas arrastramos. Nosotros Dormimos en lo húmedo, tú en seco. Ayer Tosiste, oh guía querido. Estábamos desesperados. ¿No irás A diñarla antes de sementera, perro maldito?

INVESTIGACION PEDAGOGICA Y FORMACION DEL PROFESORADO

1. El maestro y la investigación: Dos puntos de discusión La primera distinción hace referencia al oficio del maestro. O se es maestro o se es investigador o se es investigador y maestro o se es maestro investigador. Un primer punto por aclarar es el relacionado con la diferencia de aquellos que se dedican a la investigación educativa, pedagógica o didáctica, de aquellos que se dedican a la innovación, a la creación de teoría y a la solución de problemas. De Tezanos (1998:12) contribuye a aclarar el debate: " Los que tengan como oficio la investigación tendrán como propósito el explicar, analizar, e interpretar los procesos que dan cuenta de lo educativo, lo pedagógico o lo didáctico. " Al analizar e interpretar estos procesos, el maestro contribuye a la producción de conocimiento. " Los que tengan como oficio el enseñar, su camino innovativo contribuye, en el ámbito de lo pedagógico o lo didáctico, a la construcción de saber pedagógico. Este punto marca el límite y las distinciones entre los dos oficios: el de investigar y el de enseñar ". Los límites entre el oficio de investigar, el oficio de enseñar y el oficio de formar se hacen difusos. La segunda distinción hace referencia a los resultados y usos de la investigación. Es necesario aclarar si el maestro debe construir conocimientos propios o es mero usuario del conocimiento de otros. La actividad investigativa, con escasas excepciones, ha sido desarrollada por profesionales externos a la educación con orientación de temáticas y metodologías ajenas a la pedagogía. Un caso patético es la confusión de las temáticas investigadas por la sicología y aquellas investigadas por la pedagogía. 2. Grandes paradigmas de investigación educativa Los paradigmas (Kuhn, 1975) son realizaciones científicas universalmente reconocidas que durante cierto tiempo proporcionan modelos de problemas y soluciones a una comunidad científica. Cada comunidad científica comparte un mismo paradigma y cuando lo replantea entra en crisis y es cuando se da la revolución científica. El ciclo repetitivo de ruptura y aceptación de nuevos paradigmas es lo que genera el conocimiento científico. Contrario a Kuhn, Popper en Búsqueda sin Término (1994:178) explica el progreso de la ciencia no por rupturas sino por una continua supresión de errores y ulteriores ensayos; son los conceptos de falsación en el contexto darwiniano de la epistemología evolucionista del conocimiento. " Toda discusión científica comienza con un problema (P1) al que ofrecemos algún punto de solución tentativa-una teoría tentativa (TT); esta teoría es entonces sometida a crítica, en un intento de eliminación de error (EE); y, como en el caso de la dialéctica, este proceso se renueva a sí mismo: la teoría y su revisión crítica dan lugar a nuevos problemas (P2). Lakatos (1975) sostiene que en la práctica coexisten paradigmas distintos sin producirse abandono ni muerte del paradigma anterior. Por ejemplo, el paradigma de la psicología cognitiva complementa el paradigma conductista. La física de Newton sobrevive para muchos propósitos junto con la de Einstein. El debate se genera desde los fundamentos filosófico-epistemológicos de los paradigmas vigentes aplicados a la educación. La disputa más notoria es la del empirismo frente al racionalismo, objetivismo frente a subjetivismo, realismo frente a idealismo. Los empiristas clásicos sostienen que al conocimiento científico se llega por inducción. Los idealistas y los neo-positivistas abogan por la deducción y exigen la verificación mediada por la observación a través de ciertas reglas de correspondencia entre el dato y la teoría. Históricamente, los debates filosófico-científicos han adoptado diversas nominaciones: investigación nomológica, investigación ideográfica, investigación etnometodológica, investigación experimental, investigación naturalista. También se habla de métodos

DESARROLLO PROFESIONAL DOCENTE Y APRENDIZAJE COLECTIVO

Resumen. En los contextos educativos actuales, marcados por la implementación de reformas a gran escala, la oferta de programas de desarrollo profesional de alta calidad para los docentes en servicio es un imperativo. Las propuestas actuales para una actualización docente que se traducen en cambios en las prácticas pedagógicas incorporan principios que ayudan a los docentes a construir, a través de redes de docentes, nuevas comprensiones de estas prácticas y su contexto. En este artículo se describen las tendencias de cambio en el diseño e implementación de programas para la formación de profesores en servicio, profundizando en modelos que sustentan un aprendizaje colectivo facilitado por pares capacitados para esa tarea. Estas propuestas tienen como propósito mejorar el aprendizaje en las aulas y por lo tanto se organizan en torno a las necesidades del establecimiento educacional conceptualizado como una organización que aprende. Palabras claves: desarrollo-profesional-docente

LA FORMACIÓN PEDAGÓGICA DE LOS PROFESORES

La Educación Superior se enfrenta a una serie de desafíos en un mundo que se transforma, por ello debe revisar su misión y redefinir muchas de sus tareas sustantivas, en especial aquellas que se relacionen con las necesidades de la sociedad en materia de aprendizaje y superación continua. Un punto clave en su misión está dirigido a destacar las tareas de las universidades, Se requiere llevar a cabo esfuerzos para elevar la formación pedagógica de los profesores, lo cual tributará en una mejor preparación de los egresados universitarios.

GERENCIA DE FORMACIÓN PROFESIONAL

El presente documento denominado "Manual de Expediente Técnico de Obras de Edificación" se ha elaborado de acuerdo al programa curricular del curso de igual denominación.

DISEÑO Y PLANIFICACIÓN DE ACCIONES FORMATIVAS PARA EL DESARROLLO PROFESIONAL

quadernsdigitals.net

¿Qué es una persona adulta?. Podemos entender por adulto a toda persona que se considera que ha crecido, es decir, que ha adquirido un statu de edad, cierta madurez y autonomía. Para una persona adulta es aquella que está en condiciones de: a) aceptar responsabilidades, b) actuar bajo el dominio de la razón y c) equilibrar su personalidad.