Todos los caminos conducen a Santiago (original) (raw)
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Todos los caminos llevan a Chipre
Complutum, 2023
Resumen. El texto desarrolla el modelo de las diásporas comerciales como alternativa a la precolonización en el Bronce Final y plantea la existencia de agentes foráneos conviviendo entre indígenas en el Centro y Oeste del Mediterráneo antes de la implantación de las colonias históricas Palabras clave: banquete; heroización; micénico; chipriota; fenicio.
Todos los caminos conducen al dólar
Algunas de las características propias de todo ser vivo son nacer, sobrevivir, reproducirse y morir. Los argentinos no escapamos a estas cualidades. En la lógica búsqueda de la supervivencia hemos desarrollado habilidades, costumbres y vicios producto de las experiencias "exitosas" de un pasado que vuelve cíclicamente. El dinero es una de las herramientas que el hombre ha diseñado para facilitar y proyectar su supervivencia. Además de servir como común denominador de los bienes y servicios que se ofrecen en la economía, hace de batería que acumula energía para postergar consumos, de eso se trata el ahorro. Baterías que guardan energía para utilizarse en un momento futuro, que en ocasiones, pueden servir para que otros interesados las usen para generar más energía, compartiendo parte de esa generación con quien ofrece la propia y así sucesivamente. A este ciclo lo llamamos inversión. En resumen, el ahorro es producto de los ingresos remanentes, fruto de los consumos postergados y acumulados. La inversión es la utilización de dichos ahorros para que, a través de algún proceso de generación de dinero se pueda mejorar las potencialidades de consumir a futuro. Es decir que alguien que invierte en definitiva apuesta a que su presente postergación le permita adquirir más bienes y servicios a futuro que lo que podría haber hecho antes. Ahora, imaginemos que existe una batería que carece de la posibilidad de acumular energía en el tiempo. Habría que consumirla rápidamente, pues cuanto más se tarda menos se tiene. La experiencia, consejera del instinto de supervivencia, indicaría que no es conveniente guardar para mañana lo que se puede consumir hoy, pues la pérdida permanente de ese poder de compra hace que cada día que pasa menos podremos adquirir. Esta situación produce algunos fenómenos. Principalmente que quien no encuentra una forma mejor de proteger su capacidad de compra a futuro no lo postergue, en consecuencia se desalienta al ahorro, que como vimos anteriormente es una de la fuentes de generación de mayor valor y riqueza. Para el caso de quienes decidan seguir postergando consumos, la alternativa que les queda es buscar "otras baterias o medios de acumulacion de energia" que les permitan conservar y si es posible aumentar, como consecuencia del esfuerzo que representa diferir sus compras.
Los caminos de Santiago en México, el viaje como símbolo y esperanza
Camiño e peregrinacións na LIX (Compostela no horizonte), 2020
La leyenda del apóstol Santiago tiene dos grandes ver- tientes, por un lado es el santo de la paz que invita al peregrino a recorrer el Camino para autodescubrirse y crecer; por otro lado, es el guerrero cristiano que defiende la fe. Llegó a tierras mexicanas con la Conquista, los frailes y sacerdotes lo impusieron como pa- trón protector en muchas iglesias y comunidades. Con el tiempo, el pueblo lo adoptó gracias al sincretismo religioso tan caracterís- tico de nuestras naciones, detrás de su imagen o figura está la de Tláloc o Huitzilopochtli. Hay cientos de relatos orales que hablan de su presencia viva en múltiples regiones del país, sus templos son lugares de peregrinaje y su fiesta el 25 de julio es de las más impor- tantes. En la literatura infantil y juvenil no está tan presente como en la oralidad. Pero tomando el viaje como símbolo de crecimiento o descubrimiento, analizamos obras que tejen tres rubros que se contagian mutuamente: el viaje interior (autodescubrimiento), el camino (migración o exilio) y el viaje onírico (el sueño como auto- conocimiento).