GRAMATICAS LIBRES DEL CONTEXTO (original) (raw)
este capítulo es dar cuenta de los planteamientos más frecuentes, exponer los supuestos epistemológicos y metodológicos de que parten y trazar un bosquejo de cuáles son los trabajos y los centros de investigación más relevantes dentro de cada uno. No se nos escapan los peligros de tal pretensión. El más obvio es que la caracterización que sigue, constreñida por estrictas limitaciones de espacio, peque de parcial y que queden fuera numerosas parcelas de interés. Sin embargo, es notable que sigamos echando en falta un estado de la cuestión actualizado de la teoría gramatical española. La última revisión, la de José Portolés, 1 llega a 1952 y examina las etapas sobre las que parece existir un consenso generalizado, el Positivismo y el Idealismo. Más allá de dicha fecha mágica tenemos versiones partidistas, pero no confrontaciones de modelos. [...] Creo que el estudiante que se inicia en el campo de la Gramática española tiene derecho a saber lo que hay y dónde puede buscar. Por ello, sin pretensión alguna de exclusividad y sin que la enumeración que sigue suponga juicio alguno de valor para lo que no puedo mencionar, me atrevo a proponer las siguientes líneas (a veces también escuelas) de investigación en Gramática del español:
Estudia la relación de las palabras para formar frases y oraciones, constituidas por sintagmas.
TEXTO COMERCIAL: Se considera un texto comercial al documento emitido en razón a la existencia de una relación de negocios; en este sentido, se pretende una aproximación a aquellos escritos que, tradicionalmente, son considerados como tales: Memorando, Circular, Informe, Cartas, E-mail, entre otros. ACTIVIDADES DE APRENDIZAJE: Identifica el tipo de texto al que pertenecen los siguientes párrafos. __DESCRIPTIVO___________________ Doña Uzeada de Ribera Maldonado de Bracamonte y Anaya era baja, rechoncha, abigotada. Ya no existía razón para llamar talle al suyo. Sus colores vivos, sanos, podían más que el albayalde y el solimán del afeite, con que se blanqueaba por simular melancolías….
Es el problema de cómo el campo visual se articula en unidades separadas. Como hemos visto, esto se puede formular preguntándose: «Si en los mensajes que vienen del ambiente bajo forma de radiaciones y en los eventos que se desarrollan en el interior de nuestro organismo bajo la forma de procesos retínicos y de impulsos nerviosos, se pierde la unidad de los objetos físicos de origen, si entonces la masa de información que nos llega del ambiente está constituida por una cantidad innumerable de elementos aislados e independientes uno del otro, ¿por qué nuestra experiencia concreta no está constituida por una mirada de sensaciones, que corresponde al mosaico de estimulaciones retínicas, y en cambio está representada por un número, tal vez grande, pero siempre finito de objetos?.» En otras palabras, cuando abrimos los ojos nos encontramos frente a nuestro mundo habitual, formado por casas, árboles, automóviles. Es decir que vemos objetos y no quedan rastros de radiaciones, procesos retínicos, impulsos nerviosos, sensaciones elementales. Tanto es así, que para la mayor parte de las personas no hay ningún problema a este respecto, no hay nada que explicar: para esas personas, si vemos esas cosas alrededor nuestro es porque esas cosas están alrededor nuestro y basta. Han sido propuestas varias soluciones a este problema en el terreno científico. Según las líneas psicológicas de posición prevalentemente atomística y asocíacionística, cada impulso proveniente de un receptor daría lugar, a nivel de los centros corticales, a otras tantas «sensaciones elementales», con una correspondencia punto a punto entre«estímulos proximales» y sensaciones. De modo que se postula la existencia de una primera faz psíquica de nivel «inferior», la de las «sensaciones elementales». Sobre éstas intervendrían luego facultades o instancias psíquicas llamadas «superiores», es decir, la memoria, el juicio, el razonamiento, las cuales, a través de juicios o inferencias en gran parte «inconscientes», fundadas sobre experiencias pasadas específicas o genéricas, asociarían o integrarían las sensaciones elementales, de modo que diesen lugar a esas unidades perceptivas mas amplias que son los objetos de nuestra experiencia, con su forma y con su significado. A esta actividad Wundt la llama «sintético-productiva» o «aperceptiva», entendiendo por «apercepción» precisamente esta segunda fase «superior» que interviene sobre la primera forma elemental de actividad «sensorial». Es una teoría aparentemente muy lógica y clara, que ha dominado por mucho tiempo, y todavía hoy, con la adopción de una terminología más moderna, es aceptada por muchos psicólogos y. sobre todo, por fisiólogos y neurólogos. En realidad, los datos perceptivos concretos no tienen trazas ni de las sensaciones elementales primarias ni de la fase de elaboración secundaria, que de todos modos debiera realizarse a una velocidad muy elevada que la hiciera permanecer siempre inadvertida por debajo del umbral de la conciencia. Un planteo hipotético similar, por definición no verificable empíricamente, puede parecer cómodo porque siempre «explica» todo, pero en realidad es muy poco satisfactorio porque bloquea la búsqueda y enmascara los problemas dándolos por resueltos. Sin contar con que la capacidad de distinguir y reconocer los objetos y los individuos, de recoger significados expresivos, de ver cualidades globales, es inmediata y muy vivaz también en los niños, en los primitivos e, incluso, en los animales de los más bajos niveles de la escala zoológica, a los cuales realmente no se les puede reconocer las dotes intelectuales necesarias para cumplir los razonamientos postulados por la teoría de las «inferencias o juicios inconscientes». Un acercamiento muy distinto al problema de la articulación del campo visual en unidades separadas, es el que propone la llamada escuela de Berlín con el nombre de psicología de la Gestalt. Una de sus características principales es la importancia atribuida a la experiencia directa. Antes de construir una teoría que explique las razones de la constitución de los objetos visuales,