MILTON BECERRA: Ciencia o Fantasía (original) (raw)
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Artículo Con base a llamadas de amigos y recomendados para solicitarme ayuda para sus vidas, encuentro que ellos tienen algo en común: el menester de resolver la necesidad de sentirse seguros, amados y tranquilos. Necesidad que la puedo contextualizar en las siguientes situaciones de diferentes comunidades. La universidad de Yale en un Artículo, en ABC News: "algunos países son más infelices del mundo que otros". Y esto es en los últimos años; muchas gentes en el mundo viven infelicidad, con desbordada preocupación en sus vidas que provocan trastornos de salud mental, la idea suicida, depresión, consumo SPA, y dudas relacionadas con comportamientos sexuales, entre otros tantos síntomas. Unas estadísticas rápidas. Recetamos antidepresivos 600 veces más que hace 20 años, 600 veces la tasa de hace 20 años. La mayoría de las encuestas muestran que algunos países entre esos, Colombia y mucha gente en general no son más felices, pero si más angustiadas o con alto nivel de sufrimiento emocional (estrés). Encuestas como la Harris Survey y otras han demostrado que ciertos grupos son cada vez más infelices (estrés, depresión, sufrimiento emocional, ideación suicida), y uno de esos son los recién graduados. Son más infelices de lo que han sido nunca y más infelices de lo que habían sido previamente. Esto no está bien, la gente necesita saber de esto. En nuestra sociedad estamos vagando sin ser lo felices que podríamos ser, por lo que necesitamos entender, comprender, interpretar la necesidad de la realidad humana. La realidad de los sentimientos, de las emociones, de los vínculos familiares y sociales, de la importancia de la pedagogía del afecto que necesitan nuestras familias, nuestros jóvenes y nuestra comunidad de cualquier parte de nuestra geografía colombiana y que las gentes desarrollen sus habilidades para tramitar sus sentimientos, por solo tomar un referente. Teniendo en cuenta algunos estudios de cuáles son las principales causas externas que ocasionan los trastornos del estado de ánimo o trastornos emocionales como no tener tiempo libre de calidad, carencia financiera, desarrollar actividades desagradables (hacer cosas que nos gustan-solo porque nos obligan), cercanías con personas tóxicas, sobrecarga de trabajo, violencia psicológica (amenazas constantes, invalidación de las cualidades y logros personales) entre otras causas externas que provocan sufrimiento emocional. Solo por relacionar algunos programas del Gobierno en Reino Unido y en EE. UU. para aplicar la psicología o aprendizajes de habilidades emocionales para dirigir la conducta de la gente hacía la dirección correcta, darles un empujón para sanar o promocionar nuestra salud emocional, y lo alucinante es que estos programas, incluso cuando son implementados a grandes escalas de gobierno, realmente
Puerta al hiperespacio Hacia una vindicación de la ciencia ficción mexicana En los límites de la gran Technotitlán La gran Technotitlán Academia e investigación ¿Qué papel juega en el conjunto de la ciencia ficción mexicana el escritor que incursiona una sola vez en el género?
Ciencia y política en Max Weber
Nombrar es sacar los asuntos del caos, del no ser (…) Sacar algo del caos es, claro, traicionar ese caos" (Martín Gaite 1983: 39). También de la nada sale algo. Mas, para esto, tiene que estar dentro de algún modo. No es posible dar a nadie lo que ya no tiene de antemano. Al menos, como deseo, sin el cual no recibirá como un regalo lo que se le entregue. Es necesario que lo apetezca o haya apetecido, aunque sólo sea de un modo vago. Para que algo valga como respuesta, hace falta que previamente exista la pregunta. He aquí por qué tantas cosas permanecen sin ser vistas, tal como si no existiesen. (Bloch, 1982: 19)
La ciencia como vocación,weber
De acuerdo con vuestro deseo he de hablaros hoy sobre «la ciencia como vocación». Tenemos los economistas una cierta pedantería peculiar, dentro de la que quisiera mantenerme, y que consiste en arrancar siempre de las relaciones externas. En la cuestión que hoy nos ocupa habríamos de arrancar, pues, de la siguiente pregunta: ¿Cómo se presenta hoy la ciencia como profesión, en el sentido más material del término? Desde el punto de vista práctico esta pregunta equivale esencialmente a esta otra: ¿Cuál es hoy la situación de un graduado que está resuelto a consagrarse profesionalmente a la ciencia dentro de la Universidad? Para comprender en qué consiste la peculiaridad alemana al respecto parece conveniente proceder por vía de comparación y recordar cuál es esta situación en aquel país que más difiere 180 ,1
Este artículo es una invitación a pensar en la intersección entre ciencia y derecho a partir del registro de una forma de asimilar el progreso científico determinada por los usos de la prueba del ADN en la práctica judicial contemporánea. Para ello, el trabajo se enfoca en el carácter instrumental del ADN (la relación de medio a fin que determina su presencia en el proceso) para utilizarlo como una herramienta heurística, un dispositivo de conocimiento. Sin embargo, esta propuesta tiene un sesgo inicial que va a orientar todo el trabajo, y es el argumento de que tal carácter instrumental resulta opacado por el status ontológico de verdad que se atribuye al ADN en determinadas culturas administrativas y judiciales.
BARUJ SPINOZA: EL CIENTÍFICO FILÓSOFO
Me propongo demostrar que Baruj Spinoza no es un filósofo, sino un científico que filosofa. Primero, es necesario destacar que para muchos historiadores de la ciencia y la filosofía, Spinoza era un filósofo y no un científico porque de acuerdo a su interpretación