La práctica ordinaria de la Cena del Señor: Una invitación desde la Confesionalidad Reformada a la comunión semanal (original) (raw)

La práctica sacramental en tiempos de la confesionalización

Espacio, tiempo y forma. Serie IV, Historia …, 2008

La práctica sacramental en tiempos de la confesionalización: Cantabria, siglos XVII y XVIII. CUADRO 2. El bautismo de «socorro» en los lugares de Arcera, Bores y Rasgada durante el siglo XVIII

La Santa Cena del culto pentecostal wayuu Crape: rito de comunión sincrético

Opción, 2010

El objetivo del artículo es analizar el rito de la Santa Cena de la iglesia wayuu CRAPE para reconocer el 'proceso sincrético' que caracteriza esta comunidad religiosa. El método utilizado fue la etnografía. Para ello se seleccionó una familia convertida al pentecostalismo que ha devenido en el grupo fundador, organizador y reproductor del culto. En el rito analizado se pone en evidencia el carácter paradójico y sincrético del mismo concluyendo que la conversión de estos wayuu les conduce a una re-significación del pentecostalismo a partir de ritos y símbolos anteriores a la conversión.

Una comparativa entre la Cena del Señor Reformada y la Eucaristía Católico Romana

2017

La visión Reformada y la visión Católico Romana de la Cena del Señor presentan diferencias irreconciliables. La visión reformada de la Cena del Señor considera que en el Sacramento está la presencia real pero espiritual de Cristo, lo que difiere de la idea de presencia objetiva y material de Cristo en la visión Católico-Romana. Ambas visiones comparten la consideración de que el cuerpo y la sangre de Cristo sí están presentes ante el comulgante; pero en la comprensión reformada el pan y el vino son medios por los cuáles el creyente tiene real comunión con Cristo en su muerte, por medio de la obra del Espíritu Santo; y en la comprensión católica, en la Misa se consuma nuevamente el sacrificio de Cristo. En la comprensión reformada, los elementos son presentados a sus sentidos realmente como pan y el vino que siguen conservando su sustancia y naturaleza; en la visión Católico Romana la presencia de Cristo se hace material luego de la transubstantación, que cambia la sustancia y la naturaleza de los elementos.

LA UNCIÓN CON EL ESPÍRITU SANTO Un llamado a la misión

Raíces, 2020

está sobre mí, porque el Señor me ha ungido. Me ha enviado para dar una buena noticia a los que sufren […] para proclamar el año de gracia del Señor […] para consolar a los afligidos..." (Is 61,1-3). Presentamos algunas meditaciones sobre la unción con el Espíritu Santo, pues en las Sagradas Escrituras, Antiguo y Nuevo Testamento, el don del Espíritu o unción está siempre vinculado con una misión, exigencia que sigue vigente hoy, igual que ayer.

La comunión de deseo, una respuesta eclesial y ecuménica

La comunión espiritual ha pasado de manera inesperada al primer plano de la actualidad, debido a algunas propuestas presentadas en el contexto del Sínodo de la familia. Pero son imprescindibles algunas precisiones. Publicado como: «La comunión de deseo. Una propuesta pastoral y ecuménica», Palabra (2015/2) 63-65.

Espiritualidad de comunión, oración y testimonio cristiano

2002

Espiritualidad, oración, testimonio. ¿No evocan estas palabras realidades fundamentales e incluso jalones de la vida cristiana y de la Iglesia? Y sin embargo, en ambientes influidos por el secularismo, o al menos por el abandono de la tradición cristiana, los mismos términos suscitan a veces recelos y sospechas. Para algunos, «espiritualidad» o «vida espiritual» suena a intimismo o desencarnación, cuando no a algo enfermizo o autolimitante. Otros, cuando oyen hablar de «vida de oración» piensan que está destinada para élites de iluminados, pero no para la gente común. En cuanto al testimonio, quizá se entiende como un medio de influencia sociopolítica, sin ahondar sus posibles raíces antropológicas y teológicas. Al mismo tiempo, ¿no se asiste, sobre todo en los jóvenes, a una búsqueda de espiritualidad, de conexión personal con la transcendencia y de autenticidad, que lleva a fiarse más de los testigos que de los maestros? 1. El desconocimiento o la difuminación de la realidad cristiana en su hondura replantean la necesidad de reflexionar y exponer lo que los cristianos creemos y vivimos. En nuestros días se da una paradoja que quizá ha sucedido en otras épocas en menor medida: junto a una profundización teológica imponente-que hizo posible el Concilio Vaticano II y sigue mostrando su fecundidad-, se comprueba una ignorancia grande en las cuestiones de la fe. En todo caso, como procuraremos mostrar, las realidades y actitudes a que aluden las palabras que titulan estas páginas, se fundamentan en la Trinidad y sus intervenciones salvadoras a favor del hombre, de su vida concreta y corriente, llamada a la plenitud en Cristo.

Convertirnos a la Iglesia. Las reglas de San Ignacio para "sentir con la Iglesia"

Estamos acostumbrados a predicar la conversión al Señor Jesús, pero no podemos caer nosotros en el mismo error que muchos de nuestros contemporáneos, que separan netamente a Jesús de la Iglesia. Convertirse al Señor Jesús es convertirse también a su santa Iglesia, de igual forma que unirse a Cristo es unirse a su santa Iglesia. Su santa Iglesia. En una conferencia titulada "¿Por qué permanezco en la Iglesia?" y pronunciada a comienzos de los años 70, Joseph Ratzinger decía lo siguiente: "En la celebración de la misa se dice: «El Señor reciba de tus manos este sacrificio[...] para nuestro bien y el de toda su santa Iglesia». Siempre estuve tentado de decir «y el de toda nuestra santa Iglesia» En lugar de su Iglesia hemos colocado la nuestra, y con ella miles de Iglesias; cada uno la suya. Las Iglesias se han convertido en empresas nuestras, de las que nos orgullecemos o nos avergonzamos, pequeñas e innumerables propiedades privadas, puestas una junto a otra. Iglesias solamente nuestras, obra y propiedad nuestra, que nosotros conservamos o transformamos a placer. Detrás de «nuestra Iglesia o también de «vuestra Iglesia» ha desaparecido «su Iglesia». Pero ésta es la única que realmente interesa; si ésta no existe ya, también la «nuestra» debe desaparecer. Si fuese solamente nuestra, la Iglesia sería un castillo de arena".

PRESENTACIÓN: LA ESPIRITUALIZACIÓN DE LA RELIGIOSIDAD CONTEMPORÁNEA

El presente dossier tiene como tema central la búsqueda personal y colectiva de espiritualidad. De manera recurrente distintos autores aluden a que una característica de la religiosidad contemporánea es la preferencia por espiritualidades menos dogmáticas, alejadas de las normas y cánones de las instituciones de la religión, y cada vez más individuales, subjetivas, intuitivas y emocionales. Incluso Taylor (2007) refiere que la espiritualidad puede ser considerada una nueva forma socialmente establecida de experimentar lo religioso en la sociedad tardía. También es un hecho que diferentes actores apelan a denominar su relación personal con lo sagrado y lo trascendente como una opción espiritual (Heelas, 1996), rechazando guías y pertenencias fijas. La espiritualidad aparece entonces como el resultado de la extracción de creencias, significados, vivencias, valores y experiencias de lo sagrado de los contornos institucionalizados. Salir de la religión y optar por practicar una espiritualidad no es solamente una elección religiosa o filosófica, sino ante todo la búsqueda de un estilo de vida (De la Torre, 2012). Es un rechazo por repetir formulas instituidas, y por emprender búsquedas de sentido trascendental. Acorde con Carozzi (1999) optar por una espiritualidad implica optar por la autonomía y el rechazo del control institucional y el autoritarismo. En nombre de la búsqueda espiritual se emprenden encuentros de reconexión entre el nomos y el cosmos (Berger, 1999), entre el aquí y ahora con una concepción trascendental, entre lo tradicional y lo contemporáneo.