Condición socio-cultural y política de las personas jóvenes y misión de la Iglesia (original) (raw)

2018, Juventudes: otras voces, nuevos espacios

En la última década, América Latina ha caracterizado por dos realidades sociales paradójicas: su crecimiento económico y el tamaño de su población de jóvenes. Es paradójico porque ese crecimiento económico ha estado acompañado de un incremento de los niveles de desigualdad y de violencia al punto que, actualmente, nuestra región es la más desigual del mundo y también la más violenta, albergando a 10 de las 50 ciudades más violentas, en países que incluyen Venezuela, Honduras, México, Brasil y El Salvador. En cuanto a la composición demográfica, vale decir que, pese a la reciente tendencia decreciente en la curva demográfica, hoy por hoy, en nuestra región, 51% de la población tiene menos de 24 años, lo que equivale a alrededor de 327 millones, de un total de 641 millones de personas. ¿Quiénes son estas personas jóvenes? ¿En dónde viven? ¿Qué hacen? ¿Qué les preocupa? ¿Con qué sueñan? En el presente artículo, presentaré algunas perspectivas acerca de la realidad que viven las personas jóvenes en nuestro continente, y plantearé algunas reflexiones desde los ámbitos socio-político y bíblico-teológico, con el fin alimentar el debate acerca del papel de las juventudes en la sociedad y en el ámbito eclesial. En un primer momento, ofreceré un breve panorama de la situación de las personas jóvenes en América Latina y el Caribe y haré un énfasis en la brecha que divide a los sectores más y menos vulnerables. En esta primera sección me referiré a las juventudes latinoamericanas y caribeñas como "juventudes diversas", pues encarnan realidades distintas basadas en varios factores relacionados con su condición física y su contexto socio-económico y cultural. En un segundo momento, me enfocaré en la presión que pesa sobre las personas jóvenes de nuestro continente, pues son depositarias de grandes expectativas y responsabilidades en un mundo en el que han tenido pocas oportunidades de incidir. En un tercer momento, reflexionaré sobre el lugar de la generación juvenil en el ámbito eclesial, a partir de dos investigaciones de campo sobre juventud y religión. Finalmente, a partir del texto de 1ra Timoteo y de un estudio de caso, plantearé algunas propuestas que podrían ayudar a que las personas jóvenes dejen de ser vistas como objetos de misión a sujetos de transformación.