Emocion y cognicion (original) (raw)

Resumen En este artículo se realiza una breve descripción de las principales líneas teóricas que se han elaborado desde comienzos de siglo para explicar la naturaleza de l as emociones y el papel que desempeñan en el comportamiento humano. Se advierte que nuestro conocimiento en este asunto no avanza adecuadamente debido a profundos errores de corte epistemológico, como es la predominancia que se concede a la cognición en la explicación de los fenómenos. Las teorías cognitivas se derivan del concepto de intencionalidad propuesto por filósofos como Brentano, Stumpf y Husserl, que no es aplicable a todas las formas de emoción. Finalmente, se proponen algunas alternativas de corte anticartesiano, contra el dualismo mente-cuerpo, inspiradas en las obras de Vygotsky y Wittgenstein. Abstract We present in this paper a brief exposition of the main theories regarding emotions-their nature and role in human behaviour-that appeared from the beginning of the century. We suggest that our knowledge about the emotions go not because of deep epistemological mistakes, as the central role attributed to cognition in the explanation of phenomena. Cognitive theories stem from the intentionality proposed by philosophers such as Brentano, Stumpf and Husserl and are not sound for all the forms of emotion expression. Finally, we suggest some solutions from an anti-Cartesian point of view, against the dualism mind-body, inspired in the works of Vygotsky and Wittgenstein. INTRODUCCIÓN La gran variabilidad en las reacciones emocionales de las personas permitiría una aproximación a la estructura de la personalidad, mediante conceptos como "patrón emocional" y estudiando el influjo de las emociones en el pensamiento, la motivación y la acción (Pervin, 1998). Sin embargo, la investigación básica sobre las emociones dista todavía mucho de aportar una base firme donde apoyar dicha aproximación (Watts, 1992). En las siguientes páginas nos ocuparemos, en especial, de las complejas y problemáticas relaciones entre emoción y cognición. Intentamos no sólo dar una cierta panorámica sobre las líneas principales de investigación que se han producido desde comienzos de siglo, sino buscar solución a algunos problemas de tipo conceptual o epistemológico que ya apuntaban Fernández Dols y Ortega (1985) en un, a nuestro entender, magnífico articulo, hace ya más de un decenio. Averill (1983), en una revisión sobre la ira y la agresión, comenta que alrededor de 1910 las teorías que se utilizaban sobre la emoción eran de tipo biológico, en los años treinta triunfaban las explicaciones conductistas, en los cincuenta los modelos mediacionales y de variables intervinientes, y, a partir de los setenta, el campo ha sido dominado por las teorías de orientación cognitiva. Nosotros vamos a cuestionar ahora algunos de los aspectos centrales de esas últimas teorías. El adjetivo "cognitivo" parece impregnarlo todo, convirtiéndose casi en sinónimo de "psicológico" y dotando a los textos de una apariencia de capacidad explicativa de la que, a menudo, carecen. Desde la época de Darwin (1873/1994) se viene considerando que emociones y motivación como, en general, todas las funciones psicológicas, desempeñan un papel fundamentalmente adaptativo. Alcanzar las metas que nos proponemos y evitar las situaciones aversivas que nos amenazan son comportamientos de carácter motivacional que provocan en nosotros, o se acompañan, de las respectivas reacciones emocionales. Según Plutchik (1991) l os motivos son activados por estados internos, mientras que las emociones son desencadenadas por estímulos externos. Dicho en otros términos, los motivos proceden de una carencia y las emociones de una presencia. El proceso motivacional, se afirma, es