Castilla-La Mancha y sus topónimos (IV) (original) (raw)

2006, Rinconete. Centro Virtual Cervantes

Guadalajara, nombre de étimo árabe analizado en un capítulo anterior, no es, ni mucho menos, una excepción en el panorama toponímico de Castilla-La Mancha. La región, situada en el centro-sur peninsular, fue zona de notable influencia arábiga por el dominio musulmán durante siglos y, aunque también experimentó una importante despoblación, primero, y repoblación cristiana, después, tras la Reconquista -de lo que será asimismo fiel reflejo la toponimia, como veremos-, mantiene no pocos nombres de lugar de origen árabe. Entre los más conocidos, se puede señalar el de Albacete, nombre de la capital más poblada de Castilla-La Mancha, cuyo étimo es el ár. al-basīt 'la llanura'. La motivación resulta obvia y lógica, ya que se ve confirmada por la ubicación de la ciudad, en una amplia zona llana. La -e final de Albacete se debe a una paragoge en su adaptación castellana (adición de una vocal final para evitar la terminación consonántica).