Experiencia dionisíaca y espacio político (original) (raw)

EL TERRITORIO POLÍTICO. Los espacios del demos

publicado en Francisco Colom y Ángel Rivero (eds.): El espacio político. Aproximaciones al giro espacial desde la teoría política. Barcelona, Anthropos- México D.F., Universidad Autónoma Metropolitana, 2015, pp. 85-112

La teoría política ha mostrado tradicionalmente escaso interés por la dimensión espacial de las formas políticas. Este rasgo se ha atribuido en ocasiones a los términos eminentemente constitucionales bajo los que se ha concebido el Estado en la tradición política occidental. La territorialidad es, sin embargo, una condición ontológica o pre-constitutiva de la vida política. El sustrato geográfico de una comunidad humana condiciona las características internas de la misma y es a su vez transformado por las prácticas comunitarias. Pero el territorio no es algo por sí mismo, no es un mero un dato. Son las acciones y creencias humanas las que le conceden un significado. Las formas de territorialidad se configuran a través de prácticas dirigidas a controlar espacios material y simbólicamente delimitados. La territorialidad es por ello una producción social en la que se representa el vínculo entre espacio, historia y poder: constituye, en última instancia, la materialización del espacio político. Este texto recorre las principales figuras empleadas para representar el espacio de la comunidad política en la tradición occidental y los principios normativos que subyacen a las mismas.

Experiencias político- institucionales y territoriales en Colombia

Cuadernos de Trabajo sobre Inclusión, 2018

El propósito de este Cuaderno de Trabajo sobre Inclusión es realizar una aproximación exploratoria a procesos político-institucionales y territoriales en Colombia, para facilitar su conocimiento y comprensión desde una óptica latinoamericana, con el propósito ulterior de facilitar su discusión comparada respecto de otros, como los de Brasil y Centroamérica, e identificar posibles aprendizajes derivados de ellos. Se hace referencia a varias experiencias en territorios colombianos, incluyendo las del Programa de Desarrollo y Paz del Magdalena Medio, las Zonas de Reserva Campesina y varios procesos apoyados por la Corporación PBA, y se presentará de manera más amplia una experiencia en el Sur de Córdoba. Al abordarlas, se presta especial atención a sus aspectos metodológicos, los cuales se relacionarán a su vez con determinados aspectos conceptuales.

Partidos políticos locales: la experiencia costarricense

Revista Ciencia Política, 2013

Los partidos políticos locales han sido vistos habitualmente como partes integrantes de organizaciones políticas más grandes dentro de toda una gama de instituciones representativas. Sin embargo, diversas provincias y cantones costarricenses se encuentran familiarizados con su existencia. En tal virtud, toda vez que la existencia de dichas organizaciones políticas ha sido percibida como una anomalía política, sabemos aún poco acerca de cómo estos se organizan y operan.

Pólis y Caos El espacio de lo político

Res publica, 2009

A mi padre Julián, siembra de luz en la tierra común que nos sustenta. 1. PLÊTHOS (MULTITUD) «Pólis» deriva de la raíz indoeuropea *pel-en su variante en grado o: *pol()-u-. El lexema indoeuropeo expresa la idea de llenar. También remite a las nociones asociadas de abundancia y multitud (abundante, multitudinario, es lo lleno). «Pólis» guarda un estrecho parentesco etimológico con los vocablos griegos «pléos» (lleno), «polýs» (mucho) y «plêthos» (multitud). Aristóteles, por lo tanto, usa pleonásticamente el vocablo «plêthos» al definir a la pólis como «una cierta multitud (plêthos) de ciudadanos» 1. El término «plêthos» designa en Aristóteles una cantidad numerable (frente a mégethos, cantidad medible). La ciudad es, por consiguiente, un cierto número de ciudadanos. Plêthos será vertido en latín por el vocablo «multitudo». El que

Cuerpo, Khôra y espacio político

2009

Me propongo realizar en estas páginas un comentario de las ideas que Jacques Derrida trabajó en su Seminario del curso 1985-6, bajo el título de "Khôra, nomos, topos, logos" 1 , a mi juicio, un importante documento que aún permanece inédito. Mi interés por este documento, en concreto, se debe a que en él, con la libertad y la osadía que siempre le caracterizaron como pensador, se adentra en cierto número de cuestiones, relacionadas con un ámbito de acción y reflexión que podríamos denominar el espacio de lo político 2. En efecto, entendida esa expresión en toda su amplitud, podríamos decir que encontramos en la transcripción del contenido de las sesiones de este seminario, así como en las notas de trabajo previas o posteriores a las mismas, una detallada reflexión acerca del lugar en el que es posible la vida social, como fenómeno enraizado, tanto desde una perspectiva física como histórica. Es esto mismo lo que nos interesa destacar aquí, dejando al margen de forma deliberada la explicitación de la génesis del ensayo "Khôra ", publicado años después en la obra a la que da título. Al aproximarnos a este asunto, nos encontramos, en primer término, con la dificultad de concebir el espacio de lo político entendido, siguiendo la intuición platónica, como Khôra. Para avanzar una definición específica del mismo, que trascienda su mera descripción general como espacio, empieza Derrida su trabajo abordando el tema clásico del cuerpo del rey. Pero lo hace de una forma bastante original, puesto que se ocupa, en concreto, de pensar las consecuencias de distinto orden