La traducción del humor (original) (raw)
Una vez más, he aceptado honrado la invitación de la profesora Luis Teresa Arenas a participar en un panel de debate académico, esta vez en el titulado Humor y traducción, en el marco de la X Semana del Traductor y del Intérprete de la Escuela de Idiomas Modernos. Además, es un placer añadido compartir este panel con profesores amigos y con un magnífico exalumno. Desde un punto de vista tanto teórico como práctico, son tres las principales cuestiones que nos planteamos los que traducimos humor y los que intentamos teorizar sobre ello: ¿qué es el humor?; ¿se puede traducir el humor?; ¿cómo se traduce el humor audiovisual? Esta última, obviamente, nos la planteamos fundamental, aunque no exclusivamente, los que hemos hecho del audiovisual nuestro campo de trabajo teórico y práctico. Pasaré en vuelo rasante por las dos primeras, para detenerme algo más en la última, ya que, supongo, este es el motivo de mi presencia en este panel. ¿Qué es el humor? ¿Cómo definir el humor? Si empezamos a hojear diccionarios y enciclopedias, nos encontraremos con las definiciones más dispares, desde las lacónicas dos primeras acepciones del DRAE: "Genio, índole, condición, especialmente cuando se manifiesta exteriormente. 2. Jovialidad, agudeza", hasta la del Petit Larousse Illustré del 2007 (corregido en el 2010), que lo define como: "Forma del ingenio que busca resaltar con gracia el carácter ridículo, insólito o absurdo de ciertos aspectos de la realidad, que disimula bajo un aspecto serio una mofa cáustica" (p. 555) (traducción propia), definición esta que parece centrarse abusivamente en una cara del humor, la de reírse de los otros. Attardo (1994) y Martin (2007) dan sus propias definiciones y en todas ellas vemos asomarse las distintas facetas del humor: los juegos de palabras, la ironía, la sátira, el humor de situación, etc. Pero todos reaccionamos de distinta manera ante una situación. Todo el bagaje teórico y de investigación existente apunta a que el humor es un fenómeno más bien social, aunque uno pueda reírse solo frente a un libro o frente al televisor. Bergson (1924) dice: "Para comprender la risa, hay que situarla en su medio natural, que es la sociedad; sobre todo, hay que determinar la función útil, que es una función social" (p. 6) (traducción propia). Cuántos chistes se basan en prejuicios sociales, raciales, culturales. ¿Qué es, si no una referencia cultural, a la cultura Luis Roberts hace historia del humor y la traducción.