Conflictos Agrarios Research Papers - Academia.edu (original) (raw)

Para el Estado decimonónico, al igual que para el del siglo XX, la legitimación política y social fue una de las principales metas en las agendas públicas, dado que ésta determinaba la sobrevivencia y vitalidad del mismo. Desde esta... more

Para el Estado decimonónico, al igual que para el del siglo XX, la legitimación política y social fue una de las principales metas en las agendas públicas, dado que ésta determinaba la sobrevivencia y vitalidad del mismo. Desde esta perspectiva se buscó diferentes formas que lograran dicho objetivo entre las que se cuenta la colonización; sin embargo, el proceso de unificación nacional estuvo constantemente marcado por un antagonismo entre las políticas públicas y los efectos del poblamiento en las regiones abiertas a la ocupación. Constantemente los colonos tuvieron que enfrentar no solo los agrestes caminos y climas que acompañaban las selvas húmedas del Quindío, el Pacífico o el actual Putumayo, sino que también tenían que vérselas constantemente con empresarios que, aprovechando su injerencia en asuntos públicos, jugaban con los linderos de sus tierras para apropiarse de baldíos de la nación y por lo tanto, de propiedades pequeñas de algunos campesinos colonizadores. Una de las principales características del siglo XIX en cuanto a la colonización, es que tuvo tres frentes principales: 1) la colonización empresarial, que por ser privada fue la más organizada y efectiva en el proceso de poblamiento pero también, la que mayores conflictos generó, 2) La colonización estatal, la cual solo se pudo fomentar desde el papel pues el país no contó con capitales y empleados capaces de orientar dicha empresa de ocupación, generando por lo tanto, posibilidades para que los empresarios se aprovecharan de la situación haciéndose acreedores de grandes globos de tierra; esta colonización se fomentó con decretos que aseguraban la propiedad a quien ocupara tierras baldías pertenecientes a la nación, y 3) la colonización espontánea, la cual permitió que diversos sitios baldíos o privados pero ocultos de las principales cabeceras o caminos, se convirtieran en puntos de encuentro para ocultarse de los reclutamientos, huir de la ley o construir una vivienda que no se había logrado en otro lugar. Dada la importancia de esto, el estudio de la colonización en Colombia ha sido un tema abordado por diferentes historiadores, economistas, antropólogos, sociólogos, etc., tanto nacionales, como extranjeros donde, dependiendo del periodo, el espacio, los sujetos y el interés del investigador, se ha variado tanto en metodología de trabajo, como en la construcción de hipótesis. Sin embargo, estudiar los procesos de colonización no necesariamente tiene como objetivo central, analizar las políticas gubernamentales que giran en torno de ello, pues también se han realizado estudios que pretenden abrir debates en torno a las culturas materiales o simbólicas que se mezclan en tales procesos; no está demás resaltar el caso de los primeros