Biografia de Gamal Abdel Nasser (original) (raw)

(Alejandr�a, 1918 - El Cairo, 1970) Pol�tico y militar egipcio, presidente de la rep�blica egipcia entre 1954 y 1970. Hijo de un funcionario de correos, acudi� a la escuela primaria en al-Khatatibah, una aldea en el delta del Nilo a la que aquel hab�a sido destinado. Prosigui� sus estudios en El Cairo y particip� en las frecuentes manifestaciones antibrit�nicas y antimon�rquicas, lo que le supuso su primer ingreso en prisi�n a los diecisiete a�os, acusado de conspiraci�n. Tras la ense�anza secundaria y una breve estancia en una escuela de derecho, en 1937 fue autorizado a ingresar en la Real Academia Militar cairota y tres a�os despu�s se gradu� como subteniente.


Gamal Abdel Nasser

En 1948 combati� en la guerra contra Israel antes de ser hecho prisionero, y posteriormente sirvi� en Sud�n, entonces bajo condominio anglo-egipcio. Nasser, a la saz�n comandante, estableci� contacto con otros j�venes oficiales, igualmente descontentos con la derrota de los ej�rcitos �rabes frente al peque�o Estado jud�o y la incompetencia y corrupci�n de la monarqu�a reinante, y en 1949 formaron la organizaci�n revolucionaria clandestina de los Oficiales Libres.

Nasser y sus compa�eros, inspirados por un pujante nacionalismo �rabe y los m�todos de acci�n pol�tica de los Hermanos Musulmanes, maduraron su conspiraci�n para derrocar al r�gimen del rey Faruq I. En la noche del 22 de julio de 1952, el Comit� de Oficiales Libres dirigi� con �xito un golpe de Estado incruento que inaugurar�a un ciclo de revoluciones de similar signo en el mundo �rabe. Nasser, ya con el rango de coronel, asumi� la jefatura del Consejo de la Revoluci�n y la comandancia de las Fuerzas Armadas, mientras que el general Muhammad Naguib, nominalmente el l�der del movimiento, tom� la jefatura del Gobierno y, desde 1953, tambi�n la presidencia de la nueva Rep�blica.

El 18 de julio de 1953, coincidiendo con la abolici�n de la monarqu�a, Nasser fue nombrado viceprimer ministro y ministro del Interior, puestos desde los que revel� a los observadores su condici�n de hombre fuerte del nuevo r�gimen. La pugna entre Naguib, un moderado favorable al acuerdo con los pa�ses occidentales y a recuperar a sectores liberales de la monarqu�a, y Nasser, partidario de iniciar un movimiento nacionalista pan�rabe contra Israel y de adoptar el neutralismo frente a las superpotencias, se sald� a favor del segundo, que el 25 de febrero de 1954 se aup� a la jefatura del Gobierno y el 14 de noviembre destituy� definitivamente a Naguib y asumi� la presidencia de la Rep�blica. D�as atr�s, el 29 de octubre, la mayor�a de los dirigentes de los Hermanos Musulmanes hab�an sido detenidos al acusarse a esta organizaci�n de planear un complot contra la vida de Nasser.

El 23 de junio de 1956 Nasser someti� a refer�ndum popular un proyecto constitucional que convert�a a Egipto en una rep�blica socialista �rabe de partido �nico (la Uni�n Nacional, creada por decreto el 28 de mayo de 1957), con un sistema presidencialista fuerte y el Islam como religi�n oficial. Gamal Abdel Nasser se present� además a las elecciones presidenciales, de hecho un plebiscito al ser su candidatura la �nica permitida. El pueblo egipcio se pronunci� favorablemente en ambas consultas con pr�cticamente el 100% de los votos.

La pol�tica exterior del nuevo Egipto nasserista dio un viraje radical. El 5 de febrero de 1955 el dirigente yugoslavo Josip Broz «Tito» lo recibi� en Brioni para explicarle su propuesta de un tercer bloque mundial de pa�ses no alineados. Nasser fue uno de los participantes m�s destacados de la c�lebre Conferencia de Bandung (18-24 de abril de 1955), y los d�as 17-21 de julio de 1956 volvi� a reunirse con Tito en Brioni junto con el primer ministro indio Jawaharlal Nehru; qued� as� definido el tr�o de grandes l�deres del Tercer Mundo hasta mediados de los a�os sesenta.

El gran sue�o de Nasser era aunar a los divididos pueblos �rabes bajo el liderazgo egipcio para plantar batalla al enemigo irreconciliable, Israel, y lograr la verdadera independencia de Egipto, tanto en el campo pol�tico como el econ�mico, perdida de hecho desde que las invasiones persas derribaron al �ltimo fara�n hac�a 2.500 a�os. Nasser desarroll� la reforma agraria (puesta en marcha el 8 de septiembre de 1952) y someti� la actividad econ�mica al Estado. Dirigi� personalmente las negociaciones con el Reino Unido para la retirada de sus tropas del Canal de Suez, concluidas con acuerdo el 19 de octubre de 1954.

Puntal de los proyectos de desarrollo era la gran presa de Assu�n, en la primera catarata del Nilo, con el fin de producir la electricidad necesaria para la modernización de la economía y ganar al desierto tierras para el cultivo. Al principio se dirigi� al Banco Mundial, Estados Unidos y el Reino Unido en busca de financiaci�n. Las conversaciones comenzaron el 17 de octubre de 1955 con el malestar de Washington, pues el 27 de septiembre anterior Nasser reconoci� que la URSS y Checoslovaquia hab�an accedido a suministrarle material b�lico, hecho de gran significaci�n, pues quebraba el monopolio armament�stico de Occidente en Oriente Pr�ximo. El 20 de julio de 1956, el gobierno americano cancel� su oferta de ayuda aduciendo que el dirigente egipcio hab�a incluido a los sovi�ticos en la empresa, decisi�n que secund� el gobierno brit�nico al d�a siguiente. La tensi�n no repercuti� en la retirada brit�nica en curso, y el 18 de junio el �ltimo soldado ingl�s abandon� Egipto.

La respuesta de Nasser al boicot occidental fue espectacular y provoc� un terremoto internacional: el 26 de julio anunci� en un discurso en Alejandr�a la nacionalizaci�n del Canal de Suez y la prosecuci�n del proyecto de Assu�n sin los fondos solicitados. Nasser quiso as� presionar a Occidente como medio para obtener la financiaci�n de la presa y de paso gan� la adhesi�n entusiasta de las masas �rabes, convirti�ndose en el campe�n del emergente Tercer Mundo. Pero su osada apuesta ten�a grav�simas implicaciones econ�micas y estrat�gicas para el Reino Unido y Francia, los principales accionistas del Canal.

Alarmados, los gobiernos brit�nico y franc�s negociaron secretamente con el israel� (interesado por su parte en poner fin al cierre de Suez para sus buques, vigente desde 1949, y al m�s reciente del Golfo de Akaba, la salida al Mar Rojo, desde septiembre de 1955) la organizaci�n de un ataque conjunto contra Egipto para librarse de Nasser, su enemigo com�n. El complot militar qued� decidido en una conferencia en S�vres los d�as 22-24 de octubre. El plan establec�a que Israel invadir�a el Sina�; las operaciones militares pondr�an en peligro la seguridad del Canal, ante lo cual Londres y Par�s instaron a Israel y Egipto a poner fin a las hostilidades; Israel acept� y Egipto, presumiblemente, no, ofreciendo el pretexto para la intervenci�n franco-brit�nica dirigida a ocupar el Canal.

La ofensiva israel� comenz� el 29 de octubre con un ataque sorpresa que hizo grandes progresos en el Sina� y penetr� hasta las cercan�as del Canal a la altura de Ismail�a. El d�a 30 Londres y Par�s presentaron su ultim�tum, Egipto lo rechaz� y al d�a siguiente los aliados comenzaron a bombardear los aer�dromos egipcios y enviaron paracaidistas a Port Said e Ismail�a, a las que se sum� Suez el 5 de noviembre.

Nasser no ten�a ninguna posibilidad de derrotar militarmente a sus atacantes, pero la indignaci�n internacional y las presiones conjuntas de EE.UU. y la URSS para el cese de la intervenci�n jugaron a su favor. La ONU exigi� la retirada aliada y reconoci� la soberan�a egipcia sobre el Canal, el 6 de noviembre se lleg� a un alto el fuego y el 22 de diciembre reembarc� el cuerpo expedicionario franco-brit�nico. Nasser complet� su victoria al a�o siguiente con la retirada israel� del Sina�, una vez obtenido el gobierno jud�o (29 de marzo de 1957) el levantamiento de los bloqueos navales de Suez y Akaba.

Los a�os inmediatos a la crisis de Suez marcaron el apogeo del Egipto nasserista y el fortalecimiento de la colaboraci�n con la URSS. Fuerzas pol�ticas y movimientos militares tomaron el discurso panarabista y socialista del rais en otros pa�ses de la regi�n. El 1 de febrero de 1958 Nasser y su hom�logo sirio Shukri al-Kuwatli anunciaron en El Cairo la uni�n de ambos pa�ses en un solo Estado que tom� el nombre de Rep�blica �rabe Unida (RAU), al que se sum� Yemen el 2 de marzo. Sin embargo, en Siria pronto surgi� descontento por el centralismo egipcio y el autoritarismo del ejecutivo presidido por Nasser, y el 28 de septiembre de 1961 un golpe de Estado militar en Damasco provoc� la separaci�n del pa�s. Nasser no se opuso al hecho y mantuvo el nombre de República Árabe Unida para Egipto.

En 1958 realiz� una triunfal gira de tres semanas por la URSS; en la Plaza Roja de Mosc� pas� revista junto con Nikita Kruschev al desfile del Primero de Mayo. En 1964 recibi� la mayor condecoraci�n de la URSS, H�roe de la Uni�n Sovi�tica, que nunca antes fuera concedida a un extranjero. Aunque la luna de miel con Mosc� no se libr� de serias fricciones (por la persecuci�n de comunistas durante la uni�n con Siria, la denuncia de los comunistas iraqu�es y la absorci�n del PC egipcio por el partido oficial en 1965), lo cierto es que Egipto recibi� el 43% de toda la ayuda sovi�tica al Tercer Mundo entre 1954 y 1971. Los dirigentes sovi�ticos tambi�n comprendieron que, como otros l�deres del Tercer Mundo, Nasser era ideol�gicamente insobornable y el trato hacia �l deb�a ser m�s respetuoso que el aplicado a los reg�menes comunistas de Europa del Este.


Nasser

Al comenzar la d�cada de los sesenta Nasser acentu� el dirigismo estatal y socializante de la econom�a, extendi� las nacionalizaciones a los bancos y las compa��as de seguros nacionales (las firmas francesas y brit�nicas lo hab�an sido el 15 de enero de 1957) y a los astilleros y diversas empresas industriales (julio de 1961), y decret� una segunda reforma agraria (1962). Su poder interno, que nadie osaba contestar por la eficacia de los m�todos polic�acos, se consolid� con la presentaci�n, el 21 de marzo de 1962, de una Carta Nacional que sustitu�a a la Uni�n Nacional por la Uni�n Socialista �rabe (USA, constituida formalmente el 24 de septiembre de 1962) como partido �nico y defin�a los principios socialistas de la Rep�blica. El 15 de marzo de 1965 su presidencia fue nuevamente plebiscitada en las urnas.

Pese a los reveses de su proyecto pan�rabe, Nasser no hab�a perdido un �pice de su enorme prestigio en el mundo �rabe. El Cairo y Alejandr�a fueron escenario de numerosas conferencias de estadistas que hac�an balance de los avances en la uni�n �rabe y dise�aban estrategias de actuaci�n contra Israel. En 1964 la Organizaci�n para la Liberaci�n de Palestina (OLP) fij� su primera sede en El Cairo y, hasta la llegada de Yasser Arafat a su jefatura en 1969, Nasser mantuvo un importante control e influencia sobre un movimiento que consideraba instrumental en la lucha contra Israel y que no quer�a perder de vista por su nacionalismo particular, a menudo radical. Por otro lado, el 13 de mayo de 1964 obtuvo un gran �xito de propaganda con la inauguraci�n de la presa de Assu�n, construida con la ayuda sovi�tica, que entr� en servicio en 1968.

El creciente belicismo frente a Israel de Nasser, v�ctima de su propia ret�rica y de la imagen heroica que hab�a creado de s� mismo, alcanz� un punto de no retorno en 1967. Repitiendo la escalada de 1956, el 17 de mayo exigi� a la ONU la retirada de los cascos azules de la UNEF (que desde 1957 se interpon�an entre ambos ej�rcitos en el Sina� y Gaza), cerr� Akaba a la navegaci�n israel�, despleg� tropas en la frontera y fortific� las defensas de Sharm El Sheik, en el extremo sur de la pen�nsula del Sina�, frente al Estrecho de Tir�n y la salida al Mar Rojo. Mal informado por los sovi�ticos, Nasser estableci� una alianza militar con Siria y Jordania y redobl� sus amenazas.

Creyendo en la inminencia de un ataque, el 5 de junio Israel lanz� una formidable ofensiva que en las primeras horas aniquil� a la aviaci�n egipcia en sus aer�dromos y arroll� las defensas terrestres del Sina�. El d�a 8 las unidades israel�es completaron la ocupaci�n de la pen�nsula y alcanzaron el Canal por tres puntos, Port Said, Ismail�a y Suez. En cuatro d�as de lucha el ej�rcito egipcio hab�a sido desbaratado con un balance 11.000 soldados muertos, 5.600 prisioneros, 1.000 veh�culos de transporte y 700 tanques destruidos, y 70.000 toneladas de munici�n y equipos perdidas. Las mejores tropas egipcias -40.000 hombres- combat�an en Yemen y no pudieron llegar a tiempo.

Nasser, que siempre hab�a insistido en que no entrar�a en otra guerra con Israel hasta que no se dieran las condiciones de la superioridad militar y la unidad �rabes y el aislamiento diplom�tico del Estado jud�o, acus� primero a Estados Unidos de participar en los bombardeos (lo que no era cierto), por lo que rompi� las relaciones diplom�ticas y cerr� el Canal a toda la navegaci�n. Pero el d�a 9, abrumado por el desastre, acept� p�blicamente sus responsabilidades y puso su cargo a disposici�n del pa�s, lo que no fue aceptado por el Parlamento y la poblaci�n, que volvi� a aclamarle en manifestaciones masivas. No obstante, tras la derrota en la guerra de los Seis D�as, Nasser ya no ser�a el mismo.

En los �ltimos a�os de su vida Nasser adopt� una actitud sensiblemente m�s realista frente a Israel, pese a las declaraciones incendiarias sobre la reconquista de los territorios ocupados y a la continuaci�n de enfrentamientos espor�dicos de mayor o menor gravedad, dentro de la extra�a "guerra de desgaste" que se prolongar�a hasta la cuarta conflagraci�n, en 1973. El 17 de julio de 1970 acept� el Plan Rogers de Estados Unidos, que establec�a un compromiso de aceptaci�n de la resoluci�n 242 del Consejo de Seguridad de la ONU, un alto el fuego en el Canal durante 90 d�as y su eventual desmilitarizaci�n en una franja de 20 kilómetros, as� como su reapertura al tr�fico naval. Nasser se hab�a encontrado en su viaje a Mosc� el 29 de junio anterior con que los sovi�ticos le condicionaban la entrega de armas a la aceptaci�n del plan.

El �ltimo servicio de Nasser a la naci�n �rabe fue su mediaci�n en el Septiembre Negro jordano, la sangrienta guerra civil entre el ej�rcito hachemita y los fedayin palestinos de la OLP. El 27 de septiembre de 1970 consigui� en El Cairo que el rey Hussein de Jordania y Yasser Arafat firmaran un cese de hostilidades, pero a pesar de su amplia sonrisa durante el acto, gesto que siempre acompa�� a su exuberante personalidad e imponente f�sico, Nasser estaba agotado y al d�a siguiente, 28 de septiembre, un fulminante ataque card�aco acab� con su vida. El 1 de octubre cinco millones de egipcios rindieron, entre escenas de histeria, homenaje a su l�der desaparecido, luto que fue mantenido en muchos pa�ses de Oriente Pr�ximo, �frica y el mundo isl�mico en general.

C�mo citar este art�culo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].