La estética de la recepción (original) (raw)

Negaciones y negatividad en la estética de la recepción

2011

Al involucrar la figura del lector en los estudios literarios se analiza la estructura apelativa del texto y su relacion con la figura del receptor. Desde la segunda decada del siglo XX se puede observar la tendencia a utilizar el metodo fenomenologico para realizar estudios literarios, que involucra nociones como literalidad, desautomatizacion, extranamiento y evolucion literaria. Sin embargo a este tipo de estudios se incorporarian, con los estudios del critico aleman Wolfgang Iser, nociones que considerarian tambien la actividad de la lectura, inscrita en lo que se denomino “estructura apelativa”. Con este tipo de estudios el texto se analiza desde la reflexion sobre el lector y no solo se centra en las aproximaciones hermeneuticas que caracterizaban dichos estudios.

La estética de la recepción en La Historia Interminable

Revista De Artes Y Humanidades Unica, 2006

La estética de la recepción estudia la influencia de los lectores en la creación y estructura de las obras literarias y de qué modo la recepción por parte de los lectores condicionan lo literario. Dichos planteamientos, que se describirán en este trabajo, son visualizados en La historia interminable, del autor alemán Michael Ende. En el texto mencionado se aprecia toda una puesta en práctica, dentro de la ficción, de dicha estética, debido a la presencia de un doble texto: el texto que lee el protagonista y el que es leído por el lector. Lector y texto interactúan dentro y fuera de la ficción, y el autor queda prácticamente anulado.

Algunas categorías de la estética de la recepción y su aplicación a la ejemplaridad hispánica

A partir de los trabajos de Hans Robert Jauss, especialmente, la estética de la recepción ha sido una herramienta especialmente útil para el análisis de textos medievales. Su categoría de “Horizonte de expectativas” ha sido fundamental para entender, teóricamente, cómo enfrentarse con textos tan lejanos en el tiempo y pertenecientes a una cultura tan diversa a la nuestra. Este trabajo quisiera reparar en otra colección de categorías provenientes del mismo campo teórico, acuñadas tanto por el mismo Jauss como por Wolfgang Iser, y que pueden ser de la misma utilidad para el estudio de la Edad Media: la experiencia esética, la diferenciación entre significado y sentido, la conformación del lector implícito, el concepto del texto como juego, y otras, son de especial interés. El terreno medieval ofrece, asimismo, sus particularidades: es en especial la intención de este trabajo considerar con mayor detalle las problemáticas que el período impone sobre las definiciones de estas categorías y las cuestiones básicas que deben ser tenidas en cuenta para su aplicación.

La recepción

En otros textos 1 me he referido al interés y a la conveniencia que suscita la posibilidad de analizar el asentamiento de las literaturas modernas y de la Vanguardia histórica en la Península Ibérica como un continuum en el que es posible no acertar a encontrar cortes radicales en el proceso que se inicia (allá por 1890, con la publicación de Oaristos, de Eugénio de Castro) con la introducción en Portugal del Simbolismo y que atraviesa diferentes momentos, corrientes y estéticas (bien conocidas bajo los rótulos de Saudosismo, Primer y Segundo Modernismo, en Portugal; generación del 98, Modernismo, Vanguardia Histórica y Veintisiete, en España) hasta el estallido en España de la Guerra Civil y el consiguiente reflejo que esta situación tuvo en la vida literaria española. Se trata, es verdad, de un continuum profundamente heterogéneo, plural y diversificado, en el que se produce internacionalización de las literaturas nacionales como, en la trinchera contraria, aquellos otros que basaron en la necesidad extrema de lo vernáculo y lo castizo su propia forma de reivindicar una forma de hacer literatura que contemplase, a la debida distancia, los desafíos implícitos de la modernidad. Se produce, de este modo, un debate estético e ideológico que parece dar respuesta a la lúcida observación de Octavio Paz, en Los hijos del limo, cuando aventura que el verdadero Romanticismo de las letras hispanas, en su dimensión de respuesta global de las artes y el pensamiento ante un modelo insuficiente, se produce, años después, en el entorno modernista. He defendido también que esta posibilidad abierta de creer que existen hilos, visibles o subterráneos, que vinculan los tres grandes momentos en que podemos dividir este continuum (el Simbolismo y Saudosismo en Portugal, en convivencia con el Modernismo y la Generación del 98 en España, en primer lugar; la Vanguardia histórica española y el Primer Modernismo portugués, en segundo; el Veintisiete España la impresionante nómina de los " paladines de su fama " en contextos como el francés, el italiano, el inglés, el alemán, el sueco o el castellano, entre cuyos valedores menciona a Darío, Unamuno, , además del catalán Ribera i Rovira 21 . Pascoaes, por su parte, contó entre sus traductores con Valentín de Pedro y, muy especialmente, con Fernando Maristany, que compartió con el poeta de Amarante su interés por la poesía de matriz intimista y de pensamiento. Se trata, en definitiva, de cuatro autores que contaron con una presencia verdaderamente importante en España, con varias decenas de libros traducidos y con mediadores del prestigio y respeto de Unamuno, Darío, Díez-Canedo o González-Blanco. Además, sus firmas estuvieron presentes en varias de las revistas españolas más importantes del momento, como Renacimiento Latino, La vida literaria,

Aspectos fenomenológicos y hermenéuticos de la estética de la recepción en Mario Presas

Boletín de Estética

Este trabajo intenta ser un ensayo de aproximación a la obra filosófica de Mario Presas. Su principal interés reside en reconstruir la original estética de la recepción de este pensador argentino, comprendida en términos fenomenológicos, hermenéuticos y aun existenciales. Abarcamos el período que va de mediados de la década de 1970 a comienzos de la década del 2000. En un primer tramo, apuntamos a dar con la clave de su idea misma del filosofar, tal como esta queda puesta de manifiesto en sus comentarios de Edmund Husserl y Martin Heidegger. En un segundo tramo, nos ocupamos de su teoría del acto de leer, cubriendo el trayecto que lleva de Roman Ingarden a Paul Ricœur.

La tolerancia de la estética de la recepción o el resultado de una exaptación estética: belkitsch

2015

The purpose of this paper is pointing out the importance that the changes in views have on the shaping of a certain aesthetic, regarding to kitsch. Thus these changes are the result of the transformation in the context of reception of works of art. We intend to enlighten about the mutation that the concept of kitsch has experienced by basing it on both the aesthetic of the reception and the neurology, since this concept changed from a pejorative use to become the paradigm of an ‘avant-garde’ aesthetic. We will suggest the name of Belkitsch for this evolved and positive Kitsch, which escapes from its classic definition as depending on the existence of an experimental avant-garde to be popularized.

Meyerhold: un precursor de la Estética de la recepción

ESCENA. Revista de las artes

En el primer cuarto del siglo XX y frente a las tendencias dominantes del teatro burgués, cobran fuerza dos tendencias artísticas antitéticas que persiguen objetivos antagónicos: la que apuesta por la re-teatralización de la escena y la que opera en la des-teatralización. Meyerhold se sitúa en la primera, y en ella, tanto desde sus espectáculos como en sus escritos teóricos, formula un conjunto de principios fundamentales en la comprensión de la comunicación teatral y en la consideración de las funciones del director de escena que lo convierten en un pionero de las teorías de la recepción. Un aserto que pretendemos probar con este trabajo, elaborado a partir de una revisión de su obra teórica y de literatura científica especialmente relevante. Como conclusión, destacamos la relevancia de las propuestas de Meyerhold para reconstruir un teatro que, asentado en la razón crítica, sirva para la construcción de una recepción igualmente crítica.