Notas sobre el misterio del mal desde la antropología teológica de Juan Luis Ruiz de la Peña (original) (raw)
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mal en la escatología de Juan Luis Ruiz de la Peña
2021
El Catecismo de la Iglesia Católica indica que “No hay un rasgo del mensaje cristiano que no sea en parte una respuesta a la cuestión del mal”1. Si es verdad que el conjunto de la fe cristiana constituye la respuesta a la cuestión del mal, entonces no podemos prescindir de la reflexión que se ha llevado a cabo desde la escatología. Pues en principio, el tema por antonomasia ante el mal, es la esperanza, una esperanza que se va forjando desde el acontecimiento de la encarnación hasta la resurrección de Jesucristo. El mismo Jesús no deja sin esperanza a la humanidad, ya que promete la vida eterna, una vida en comunión con Dios. La vida del ser humano no queda diluida en la muerte, sino que Jesús abre las puertas para que el futuro del hombre tenga sentido. Por eso, en este artículo abordamos el mal desde la clave escatológica, teniendo en cuenta que, para Ruiz de la Peña, la escatología no contiene ninguna futurología y tampoco es una futurología más entre otras. Además, indica que a ...
El mal: una respuesta desde la antropología de Torres Queiruga
Veritas, 2020
Resumen El problema del mal ha dado lugar a debates en diferentes ciencias durante toda la historia. La teología no ha sido exenta de esta problemática, sobre todo cuando trata de comprender cómo un Dios bueno y todopoderoso que crea por amor "consiente" el mal en su creación. Esta investigación tiene por objetivo responder al problema del mal, a través del pensamiento antropológico de Torres Queiruga, para lo cual se utiliza una metodología de tipo cualitativo-documental y un método interpretativo de toda la obra del teólogo español, arribando a la conclusión según la cual el mal es inevitable en la creación por su condición ontológica de finitud, por lo que la acción de Dios frente a este problema se da a través de las acciones amorosas del hombre, lo cual lo demostró Jesús de Nazaret, quien con su praxis existencial hizo evidente que Dios es el anti-mal.
El problema del mal: una aproximación teológica desde San Agustín
Para ti no hay absolutamente ningún mal. Y no sólo para ti, pero ni para el conjunto de tu creación, porque nada hay fuera que pueda irrumpir y corromper el orden que le has impuesto" (Confesiones Cap. XIII, 19) La existencia del mal en la historia humana ha sido siempre una de las causas de crisis en nuestra convivencia y de nuestra manera de relacionarnos con nuestro entorno natural. Muchas interpretaciones han surgido en busca de una respuesta más o menos consensuada de cuál ha de ser la causa del mal, y cuál debe ser nuestro comportamiento ante la realidad del mal. ¿Es el mal algo que Dios permite? ¿Tenemos nosotros responsabilidad moral frente al mal? ¿Es el mal una realidad determinada por el destino, o por fuerza sobrenatural que nosotros no podemos controlar o cambiar? Estas y otras preguntas se levantan en nuestra mente cuando se trata de lidiar con este tema.
Anales del Seminario de Historia de la Filosofía, 2017
Resumen. El objetivo de este trabajo es revisar las posturas de Pierre Bayle y David Hume en torno al problema del mal, para determinar si la postura de Hume se reduce a la de su predecesor o si existen diferencias más profundas entre ambos. Bayle propone una solución fideísta, declarando que se trata de un misterio que está por encima de la razón al que debemos adherir a partir de la creencia, mientras que Hume se limita a suspender el juicio al respecto. En primer lugar, se reconstruye el planteo del problema del mal y sus consecuencias sobre la moral en los dos autores. Luego, se revisan sus críticas a la teología racional y el papel que juega el escepticismo respecto de la religión. Se concluye que la influencia de Bayle sobre Hume está centrada en mostrar las limitaciones de la razón humana para abordar el problema, y que el aporte original de este último se vincula con la defensa de la filosofía como un tipo de especulación autónoma. Abstract. This article aims to examine Pierre Bayle and David Hume’s thoughts about the problem of evil, in order to establish if Hume’s position can be reduced to Bayle’s, or if there are deeper disagreements between them. While Bayle proposed a deistic answer to it, stating that it is a mystery that is beyond reason and we must adhere to it from our beliefs, Hume con ned himself to suspend his judgment about it. First of all, the way in which both authors pose the problem of evil and its consequences in the moral eld is reconstructed. Secondly, their criticism of rational theology and the role of skepticism in their thoughts on religion are looked through. The conclusion states that Bayle’s in uence on Hume is centered in pointing out the limits of reason to deal with the problem, while Hume’s original contribution resides in the defense of philosophy as an autonomous kind of re ection.
Resumen Este artículo es una reflexión filosófica sobre los rasgos esenciales de aquella estructura del ser del hombre donde se halla escondida la presencia esencial de Dios: el centro del alma. La tesis por demostrar es que la condición de posibilidad de la unión mística es la presencia escondida de Dios en el centro del alma. Comienzo por explicar que la antropología mística de san Juan de la Cruz se distingue tanto de la teodicea como de la teología y de la psicología. Posteriormente, muestro que tanto el ser como la existencia del hombre tienen su principio en Dios. A continuación, argumento que el deseo que origina el comienzo del proceso místico hunde sus raíces en la presencia de Dios en el centro del alma. Finalmente, hablo de los dos posibles modos de vida que el hombre puede adoptar: la existencia carnal y la espiritual.
La finalidad de esta meditación es responder a la pregunta ¿qué es el hombre?, a partir del análisis del testimonio místico de San Juan de la Cruz. El texto inicia justificando la idea según la cual, la antropología sanjuanista tiene por principio y fundamento la unión de semejanza amorosa con el Esposo Cristo. A continuación, se muestra que el origen de la existencia se remonta al poder creador del amor divino. Posteriormente, la reflexión se ocupa con el análisis de la condición redimida y encarnada del hombre. La filosofía que aquí desarrollo es antropología por su objeto; fenomenología, por su método; hermenéutica, porque aquello a lo que se dirige la pregunta por el ser del hombre es una construcción textual.