Elena de White, el diezmo y las organizaciones independientes – Parte I (original) (raw)

¿Debemos creer todavía en Elena G. De White?- Primera parte

Revista Estrategias para el Cumplimiento de la Misión, 2015

Entre los Adventistas del Séptimo Día, existe un sector que manifiesta cierto escepticismo, o abriga dudas, en aceptar a Elena G. de White como depositaria del don profético. Inclusive, hay quienes han rechazado y combatido ese ministerio profético, y lo continúan haciendo hasta hoy por diferentes medios, quizás por ignorancia sobre el contenido y el valor de sus escritos. Sin embargo, una lectura objetiva del ministerio del don de profecía en el seno de la denominación, evidencia el valor incalculable, en el surgimiento, desarrollo y consolidación del pueblo remanente. Este trabajo, hace referencia al aporte del don de profecía en el adventismo, con el propósito de confirmar la creencia y confianza en su conducción.

Después del marxismo, después del anarquismo: Laín Diez y la crítica social no dogmática

El presente artículo documenta y analiza la figura y escritos de Laín Diez Kaiser (1895 – 1980). Postulamos que a través de su trayectoria literaria se expresa un enfoque de la crítica social inspirada por sus principales referentes – marxismo y anarquismo – pero no reducible a uno de estos de manera exclusiva. Una perspectiva que, a partir de la crítica del dogmatismo doctrinario, arriba a una visión constructiva y dinámica de la cuestión social. Se distingue y examina las notas clave de tal enfoque, el cual plantea el problema de la vigencia y superación de los referentes de la crítica social.

Ensayo: Hayden White, empirismo y la salida figural

La importancia de Hayden White para la teoría de la historia simplemente no puede ser sobreestimada. Para este campo, Metahistoria —la obra más discutida de este intelectual norteamericano— marca un antes y un después. Si bien la producción académica de White ha significado un punto de inflexión, la recepción que ha tenido su pensamiento ha sido, mal que bien, mixta. Es decir, hay tanto detractores como defensores de su obra. Esto se debe a que el pensamiento de White no es necesariamente sistemático, sino fértil —productor de más debates, sean a favor o en contra. En definitiva, como bien lo puso Richard T. Vann, “[…] su pensamiento [el de White] siempre ha estado en movimiento”.