Prensa, política criminal y opinión pública (original) (raw)

Prensa, propaganda y opinión pública

Y Dios apoyará al César. Guerra de Sucesión en Aragón, 2006

Estudio sobre la prensa utilizada en la Guerra de Sucesion al trono español, especialmente la prensa austracista de 1706-1707

Prensa y política

La verosimilitud y el pragmatismo en los relatos de prensa gráfica

Resumen En mi investigación de doctorado, en curso, sobre emergencia y caída de líderes del Partido Justicialista de Salta (Argentina), observo relatos de la prensa gráfica que describen eventos de la dinámica política a partir de chismes, rumores y confidencias obtenidos en interacciones mediadas por la confianza y la intimidad con dirigentes, funcionarios y trabajadores próximos a los líderes locales. Aunque éstos no pueden ser verificados, la credibilidad en las informaciones, para los escritores y periodistas, se sostiene también en la confianza. Sin embargo, lo que es más importante, los análisis e interpretaciones que los relatos desarrollan construyen veracidad a partir de la verosimilitud. La proximidad de la descripción con aquella mirada dominante que considera la política como una actividad carente de valores, cuyo pragmatismo se opone a la política de ideales, permite alcanzar esa verosimilitud. Así, las descripciones más efectivas en la estimación del cálculo político, la estrategia e intereses de los implicados -con pruebas en gestos políticos solidarias a esa estimación-serían las más próximas a los hechos 'reales'. Sin embargo, esta ponderación de intereses por sobre valores ofrece un sesgo al momento de considerar esos relatos como fuentes, puesto que eclipsa aquellas orientaciones morales que, como otros estudios indican, serían muy difundidas entre los dirigentes peronistas.

Prensa y poder político

El Catoblepas, 2005

La civilización es la hija de la cultura, la técnica y del progreso. El endiosamiento del avance técnico, al desequilibrar su relación con otros factores civilizadores como educación, participación en la vida pública, etc., convierte al progresismo en contaminación de ideas y modos sociales. En esa contaminación juega un papel básico la prensa como, idea que repetiremos, "educación para adultos". El progreso, en tanto busca monopolizar el desarrollo humano como ídolo público, es uno de los monstruos que ha engendrado el sueño de la razón que nos representó Goya, un sueño que no admite otros factores como sentimientos, identidad, etc. La razón, asegura Joaquín Estefanía, en un determinado momento histórico de vacío teológico, convertida en abstracción de logos, deviene en caricatura de sí misma. El rápido desarrollo llevó a Heidegger a definir la técnica como una máquina devastadora. Julián Marías nos recuerda que "la sociedad técnica ha situado a sus gentes en un nivel de adaptación muy superior (...) y se les antoja natural y hasta insuficiente" 1 . La informatización la exigen en las cocinas y es aceptada de forma natural en las oficinas. En pos de ese progreso sin barreras, las mayorías "adoptan una actitud moral de disfrute de ese mismo progreso, olvidando la palabra deber y sustituyéndola en todo caso por derecho, que reclaman como algo de su propiedad" 2 . Pero la tecnología no es inocua. La revolución tecnológica ha traído una revolución moral, sustituyendo los valores cristianos, dice Octavio Paz, por "un nihilismo de signo opuesto al de Nietzsche, no estamos ante una negación crítica de los valores establecidos, sino ante su disolución en una indiferencia pasiva". El paso del guerracivilismo a la indiferencia. Paralelamente, los cambios se suceden. Los habitantes del mundo desarrollado están en una adaptación permanente para poder afrontar la incertidumbre, la complejidad de los cambios. Estos son los planteamientos del mundo desarrollado, cuya propia definición incorpora a la tecnología como protagonista. "Interpretar el mundo desde el punto de vista de la tecnología favorece a las naciones industriales, aunque solamente en un sentido analítico, al tiempo que se reconoce el hecho de que la parte no tecnológica del planeta se define a menudo en parámetros tecnológicos, es decir, como " 3 . El auge de la técnica universaliza un modelo político y económico común a los países occidentales: la democracia parlamentaria y el mercado libre. De forma paralela, se inicia la creación de una elite tecnológica. El modelo postindustrial genera renueva sus cuadros dirigentes. El poder fluye hacia quienes controlan las comunicaciones. Nuevas profesiones se acercan al poder por medio de su influencia en la vida laboral y social cotidiana.. "Dominan el maquinismo y los imperativos tecnológicos, en radical desacuerdo con toda la humanidad y los imperativos morales. Un proceso basado en la expansión continua acaba por aplastar todas las ideas dignas de una adhesión humana" 4 . El proceso tecnológico descansa sobre la productividad y la eficacia. El dato es esencial para explicar la importancia de los medios en el proceso de globalización y en la aceptación del mismo por una mayoría inerte. El símbolo de la globalización, la aldea global, ha venido por medio del desarrollo en las comunicaciones y el empuje de los medios de comunicación. A través de ellos se presentan modelos de comportamiento y traducciones de la realidad. "La presentación y el acceso a la realidad, tanto pública como privada, es obra de los medios (...) reformulan lo real en función de sus intereses, sus usos y sus valores" 5

Prensa, poder y terrorismo

Los medios de comunicación tienen una vital importancia para el fenómeno terrorista. El terrorismo siempre tiene la necesidad de que el resultado de sus acciones aparezca en la primera página del periódico, en la primera línea de la información, en el primer plano de la agenda de un telediario. Si, siguiendo la máxima de Clausevitz, la guerra era la continuación de la política por otros medios, se puede afirmar, siguiendo a los anarquistas del siglo XIX, que el terrorismo es la continuación de la propaganda. Pisacane, el héroe del Risorgimento que perdió la vida en 1857 durante la expedición de Calabria, hablaba de una « propaganda con los hechos ». Los anarquistas italianos Malatesta y Cafiero afirmaron, en su declaración de 1876, que « el hecho de la insurrección destinado a afirmar los principios socialistas con los hechos es el medio más eficaz de propaganda y el único que, sin engañar ni corromper a las masas, puede penetrar en las más profundas capas sociales y conducir a las fuerzas vivas de la humanidad al combate que libra la Internacional » 1 .

Prensa, estado y terrorismo

Chasqui. Revista Latinoamericana de Comunicación, 1991

El ser humano envenena los ríos, quema y tala los bosques, degrada a sus pares y se autodestruye. Pero él no lo sabe. Los medios de comunicación deben concientizar lo sobre su realidad. Para que cambie. Y a tiempo.

Crimen y castigo Una mirada desde las lineas editoriales en prensa y TV

Resumen/Summary Las líneas editoriales representan el filtro de qué y cómo la industria de los mass media ve (o quieren que veamos) lo que sucede en las calles. El presente estudio tomó en cuenta varios medios impresos y de TV con diferentes líneas editoriales, para ver de qué manera estos medios le relatan al público los acontecimientos delictivos. Los resultados mostraron que el sistema estatal/progubernamental vetó casi en su totalidad la violencia criminal en Venezuela, mientras que los medios privados informaron ampliamente sobre el tema, especialmente sobre homicidios. Por otro lado, en lo que refiere al castigo criminal, los resultados arrojaron una cobertura mucho más ecuánime entre los medios estatales y privados. Palabras claves: Línea editorial, noticias, crimen y castigo. Publishers lines represent the filter of what and how the media industry see (or want to see) what happens in the streets. This study took into account several print and TV media with different editorial lines, to see how the media will tell the public the criminal events. The results showed that the state-system/ pro-government vetoed almost all violent crime in Venezuela, while private media reported extensively on the subject, especially homicides. On the other hand, when it comes to criminal punishment, the results showed a much more balanced coverage between state and private media.