La crónica en el periodismo narrativo en español (original) (raw)
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La subersiva vocación de contar - crónica periodística -
Revista Rocinante, 2018
Revista Rocinante No 121. El oficio de cronista goza actualmente de un renovado prestigio que habría sido difícil de imaginar apenas una década atrás. En 2008, la Constitución del Ecuador se reformó en un proceso democratizador para garantizar derechos individuales, colectivos y de la naturaleza. A diez años de su aplicación, varias organizaciones de defensa de derechos humanos emprendieron la evaluación de las garantías y los casos reportados por la sociedad civil como graves violaciones a la vida. ¿Contribuye la crónica con enfoque de derechos al registro, memoria y denuncia de delitos? A diez años de la promulgación de la que se precia de ser la Constitución más garantista del continente, varias organizaciones de defensa de derechos humanos emprendieron la evaluación del cumplimiento de esas garantías frente a los casos reportados por la sociedad civil como graves violaciones a la vida. La cobertura de narcotráfico, trata y tráfico de personas, así como delitos ambientales continúa haciendo del periodismo un oficio altamente riesgoso. 2017 registró 12 periodistas asesinados y 507 agresiones según la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP); mientras que el informe de la Federación Internacional de Periodistas (FIP) reconoce a 81 periodistas asesinados, entre ellos a ocho mujeres. El periodismo evidencia la trama de corrupción de redes criminales en la que, con frecuencia, el principal agresor es el mismo Estado llamado a garantizar esos derechos.
La crónica no ficcional: la mirada del cronista y el narrador
Relevante e identificable en una gran cantidad de producciones de las últimas décadas, la crónica no ficcional problematiza la concepción y los lineamientos del género. El reconocimiento de su vigencia se constata en las profusas antologías publicadas que han seleccionado una amplia variedad de crónicas; antologías que, a su vez, ponen en primer plano un estado de situación del género. A partir de las diferentes modalidades que esas crónicas exhiben, nos centramos en algunas categorías, deudoras de los recursos ficcionales, en particular los procedimientos vinculados al narrador. En un corpus de crónicas realizado ad hoc, identificamos los recursos o procedimientos estructurales que caracterizan su escritura. Es así como el género que imbrica a la crónica, al testimonio y al relato ficcional habilita una matriz discursiva en la que algunos escritores despliegan una particular mirada personal. En ese marco, entonces, nos interesa indagar cómo esa visión singular se constituye a partir de la puesta en juego de la perspectiva narrativa, la elección de un narrador determinado, la voz que, en la construcción de esos relatos, configura la impronta personal de ciertos escritores. Palabras clave: crónica no ficcional, narrador, recursos ficcionales.
Las narrativas del yo en la crónica contemporánea
Si bien es cierto, desde su surgimiento la crónica ha estado cruzada por la subjetividad de un Yo que observa el mundo y enuncia desde un lugar determinado en él, durante los últimos años, en lo que los departamentos de marketing de las editoriales han llamado “el boom de la crónica hispanoamericana”, el peso de ese Yo se ha vuelvo cada vez mayor, modulando de forma evidente la función referencial del texto. Ello no sólo desde el prisma por el cual se observa y filtra la realidad, sino también y sobre todo, desde la inclusión de estrategias escriturales propias de la autobiografía, el testimonio, los diarios de vida y otras narrativas del Yo. Este proceso, más allá de agudizar la hibridez propia de la crónica, implica una complejización de sus elementos constitutivos, entre sí, pero sobre todo en relación con el contexto sociocultural que los engendra y, en buena medida, los define.
ConcienciaActiva21. Ética y valores en un mundo globalizado, 2011
La pregunta: ¿qué diferencia existe entre una crónica y un cuento? suele ser una de las interrogantes más comunes y reiteradas entre las varias que motivan los textos de crónicas, en especial, cuando deseamos establecer alguna definición materialmente concreta entre esos y otros textos, al menos, desde el punto de vista literario. La necesidad de procurar alguna distinción entre las crónicas y las demás especies históricas, pongamos por caso los anales; o entre ellas y alguna de las formas genéricas de los discursos de las ciencias sociales, por ejemplo la reseña literaria; o entre ellas y los otros géneros periodísticos, como la noticia, no son frecuentes. No de la misma manera que se hace visible ese requerimiento, ese impulso un tanto irresistible, en el campo de los estudios literarios. Sin ánimo de ser exhaustiva ni en definitiva concluyente, en este artículo intento dar respuesta a esa pregunta inicial que pide distinguir la crónica del cuento. Hablaré entonces sobre sus posibles vínculos, y acerca de las distinciones formales que parecen existir entre uno y otro tipo de enunciado. Esas semejanzas y diferencias me permitirán exponer y reflexionar sobre la singularidad del (tiempo) "presente" en un conjunto de crónicas periodístico-literarias venezolanas de las últimas décadas del siglo XX.
Oficios Terrestres, 2008
l espacio de concentración de relatos sobre "la realidad" que ofrecen los medios de comunicación atrajo en los últimos tiempos la mirada de estudiosos sobre la narrativa periodística. Nuevas revisiones disolvían las fronteras que tradicionalmente se erigieron-separando, según algunos; mixturando, según otros-las aguas del binomio periodismo/literatura. En este lugar, la crónica se instala como una escritura que huye de dominios, fronteras y domesticaciones, y encuentra, en su propia transformación, un modo de adherir al latido del tiempo social. En el principio fue la narración La más subjetiva de las lecturas que podamos imaginar nunca es otra cosa más que un juego realizado a partir de ciertas reglas (…). Esas reglas proceden de una lógica milenaria de la narración, de una forma simbólica que nos constituye aun antes de nuestro nacimiento, en una palabra, de ese inmenso espacio cultural del que nuestra persona (lector o autor) no es más que un episodio. Roland Barthes
Volviendo sobre la crónica y las añejas tensiones entre periodismo y literatura
Este artículo indaga sobre la tensión entre periodismo y literatura relacionada con el género crónica que persiste desde finales del siglo xix. En el recorrido propuesto se reconstruyen parcialmente las discusiones y/o valoraciones en tres momentos significativos: las primeras décadas del siglo xx, el periodo que comprende entre los sesenta y ochenta, y un último momento en el que se da el “resurgimiento” de la crónica. En el análisis diacrónico se consideran dos series: una que se inicia con los escritores modernistas a finales del siglo xix, otra que nace y se desarrolla en las redacciones y que tiene como característica la presencia del periodista en el lugar de los hechos y que excede los ceñidos rasgos de la noticia. El texto procura reconstruir las valoraciones sobre la crónica y precisar qué rasgos de ellas son destacados por algunos escritores y cronistas, como así también por parte de la crítica literaria. Este recorrido finalmente permite pensar en una reformulación del canon fundamentada tanto en valores literarios y narrativos como en aquellos que son propios de la práctica periodística.
Las relaciones entre literatura y periodismo son consideradas ambiguas y conflictuales. Haría falta subrayar la complementariedad que existe entre esas dimensiones creativas de la comunicación humana para valorar la combinación de los respectivos recursos creativos. En virtud del intercambio de técnicas y estrategias estilísticas y estructurales, resulta fundamental centrar la atención en los géneros híbridos originados por tal encuentro, como es el caso del reportaje narrativo. Este estudio analiza sus elementos connotativos, repasando las evoluciones de las principales teorías de clasificación de los géneros periodísticos en el ámbito español, según una perspectiva comparativa. // The relationship between literature and journalism is regarded as ambiguous and conflicting. It would be necessary to underline the complementary nature of the two creative dimensions of human communication in order to assess the combination of creative resources available. By virtue of the exchange of stylistic and structural techniques and strategies produced at the crossroads of the two fields, it is essential to devote attention to the hybrid genres originated by such an encounter, as is the case with narrative reporting. Therefore, this study analyzes its connotative elements, reviewing the evolution of the leading classification theories of journalistic genres in the Spanish context from a comparative perspective.