San Agustín y san Juan. La persuasión del universo simbólico (original) (raw)

La Hermenéutica de la creencia en San Agustín

Estudios De Filosofia, 2013

Dentro del desarrollo intelectual de Agustín el tema de la creencia se presenta en forma diferenciada, ya para señalar su inadecuación frente a los actos de conocer, ya para señalar su necesidad frente a los actos de entender. Respecto de lo primero, es decir, el creer como diferente del conocer, su distinción puede expresarse en términos visuales: el conocer es una forma de ver, tanto literal como metafórica, mientras que el creer carece de este contacto directo con el objeto permitido por la vista. Aquí hay que evitar precipitarse en sacar la conclusión de que entre el creer y el conocer se da una relación estricta de subordinación, como si el creer fuese un acto epistémico de naturaleza inferior que sólo puede ser perfeccionado con el paso al conocer, y que si este paso no se llega a dar, el creer quedará confinado a ser un modo imperfecto de conocer. Este punto se puede argumentar con mayor detalle con base en el primer capítulo de la obra De la fe en lo que no se ve (400). A quienes sostienen que sólo creen en lo que ven, basta señalarles que ellos mismos creen y conocen muchas otras cosas que no ven, que se encuentran en la propia alma, cuya naturaleza es invisible. A esto se puede replicar que los objetos presentes en el alma pueden ser vistos por un sentido interno, semejante a la visión exterior, luego las cosas que allí se dan sí se ven. Lo inadecuado de esta respuesta se expresa con ironía: "dicen estas cosas como si a alguno se le mandara creer lo que ya tiene ante los ojos". 1 Es evidente que si cosas presentes al sentido interno se pueden ver con el entendimiento, no es a ellas a las que se hace alusión en primer lugar; se trata, más bien, de la creencia en los afectos que los otros sienten por nosotros, pues estos son imposibles de reducir al patrón visual. En efecto, el alma del otro no se puede ver, como quiera que se entienda este ver, y aunque sus obras y sus palabras se ven, el afecto mismo del amigo reside más allá de lo corporal y del conjunto de mis propias afecciones internas. Luego, si no se ha de quedar "aislado en la vida sin el consuelo de la amistad'' será preciso creer lo que no se puede ver, ni oír, ni conocer por el testimonio de la conciencia;~ por eso, habrá que admitir que allí adonde no pueden llegar ni la vista ni el entendimiento, llega la fe. Una última objeción conducirá al quid del argumento: 1 f invis. l. 2. 2 f invis. l. 2.

San Agustín y los sentidos. Algunas consideraciones

En esta ponencia se examina el papel que juegan los sentidos en la descripción del conocimiento de Dios en algunos pasajes del obispo de Hipona y, en especial, algunas descripciones que hacen uso de metáforas "gustativas" (tropología del gusto).

San Agustín y la crisis de la razón actual

Hay una verdad que el hombre puede conocer y poseer pero sólo tanto y en cuánto tenga una razón dispuesta y en forma para ello. En un mundo con una razón débil y con un pensamiento que sigue la moda, es decir, hundido en el relativismo y el escepticismo. ¿Podrá el hombre encontrarse con la verdad? No es posible. A partir de rehabilitar la capacidad cognoscitiva del hombre, de disponerlo en una apertura consciente a la objetividad y una verdad que lo trascienda, es que podemos aspirar a superar el relativismo imperante. San Agustín responde “intellige ut credas, crede ut intelligas” y volarás sobre las alas de la razón y la fe hacia la verdad.

San Agustín y Hannah Arendt. Tiempo y promesa

Paralaje. Revista de filosofía, 2010

Según lo permiten los textos de Agustín y Hannah Arendt, se ponen en juego las nociones de tiempo y promesa para su análisis y comparación. En Agustín como promesa orientada a la muerte, en Arendt como posibilidad humana de romper la necesidad. Se trata de un estudio descriptivo que expresa la incompatibilidad entre la teología natural agustina y el reposicionamiento de lo político en el debate filosófico antitotalitario de mediados del siglo XX del que Arendt fue parte.

El hombre y Dios en San Agustín

Acta Académica, 2007

A filosofia é concebida por Santo Agostinho como reflexão do homem sobre o homem. O homem ao se conhecer conhece a Deus presente em sua alma. Agostinho sublinha o princípio da autoconsciência ou da subjetividade e o enfatiza a ponto de colocar o problema de Der. intrínseco ao próprio homem. Ou seja, o problema de Deus surge a partir do próprio momento em que o homem reflete sobre si mesmo. Agostinho não está interessado mormente com o mundo externo. Para ele, porém, as coisas por si mesmas, são mudas, são somente "coisas"; são experiências para o sujeito da experiência que é o homem. A experiência é contacto humano, é humana somente; há experiência onde há o homem e a experiência é só do homem, ou seja, de urna consciência pensante.

De Heisenberg y Gödel a San Agustín, o de la incertidumbre al misterio educativo

Los objetivos del presente escrito son, por una parte, manifestar la repercusión que han tenido las conclusiones de las ciencias físico-matemáticas del siglo XX en los terrenos educativos y, por otra, recuperar el pensamiento agustiniano como pista de solución a los problemas heredados en dichas conclusiones. Para delimitar el área de análisis del primer objetivo, recurriré a las conclusiones matemáticas de Kurt Gödel y a las de la física cuántica de Werner Heisenberg.

San Juan de la Cruz y el misticismo herético

2014

1584 años" 63. En 1579 funda el colegio de San Basilio en Baeza. Habían pedido esta fundación algunos profesores de la universidad, como Carleval o Valdivia, dos cristianos nuevos, de los que Juan será maestro, y del primero además confesor 64. Declara Juan de Santa Eufemia, en las informaciones de Baeza, el 18 de febrero de 1617: "Vió asimismo que en esta ciudad le comunicaban muchos hombres doctos y espirituales, como fueron el Doctor Ojeda, Maestro Sepúlveda, Doctor Becerra, el Doctor Carleval, el P. Núñez Marcelo, varones insignes, de santa y ejemplar vida, los cuales todos fueron discípulos del santo pa

San Agustín en Hispanoamérica: la circulación de una serie hagiográfica

Migraciones y rutas del Barroco, 2014

2014. “San Agustín en Hispanoamérica: la circulación de una serie hagiográfica”. Migraciones y rutas del Barroco. Memoria del VII Encuentro Internacional. Fundación Visión Cultural y Fundación Altiplano. La Paz, Bolivia, ISBN 978-99974-41-33-1, pp. 13-24. 2014. “El arte en la Sacristía de la Catedral y la Sala Capitular”, La Catedral de México, México, D.F., Fundación BBVABancomer, ISBN: 978-607-95345-8-5, pp.225-236. 2014. “EL árbol de la vida en el convento de Meztitlán” en Óscar Mazín (compilador) La Iglesia y el Centro-Occidente de México. De la singularidad a la universalidad. A través de Relaciones. Estudios de Historia y Sociedad. ISBN: 978-607-8257-98-0, pp. 87-111.

Confesiones de San Agustín San Agustín

Librodot 2 Tú viste, Señor, cómo cierto día, siendo aún niño, fui presa repentinamente de un dolor de estómago que me abrasaba y me puso en trance de muerte. Tú viste también, Dios mío, pues eras ya mi guarda, con qué fervor de espíritu y con qué fe solicité de la piedad de Librodot Confesiones de San Agustín San Agustín Librodot 6 6 mi madre y de la madre de todos nosotros, tu Iglesia el bautismo de tu Cristo, mi Dios y Señor. Se turbó mi madre carnal, porque me daba a luz con más amor en su casto corazón en tu fe para la vida eterna; y ya había cuidado, presurosa, de que se me iniciase y purificase con los sacramentos de la salud, confesándote, ¡oh mi Señor Jesús!, para la remisión de mis pecados, cuando he aquí que de repente comencé a mejorar. En vista de ello, se difirió, mi purificación, juzgando que sería imposible que, si vivía, no me volviese a manchar y que el reato de los delitos cometidos después del bautismo es mucho mayor y más peligroso.